La consellera de Obras Públicas, María José Salvador, anunció ayer que las instalaciones urbanas sobre las que se celebraron cinco grandes premios de Fórmula 1 en Valencia „entre 2008 y 2012„ serán abiertas a su uso «civil». Así lo explicó ayer la consellera ayer tras la visita que realizó al circuito y a los tinglados 4 y 5 de la marina real Juan Carlos I que también serán devueltos a la ciudad tras darse por finiquitado el gran premio automovilístico.

La construcción del circuito urbano superó los 100 millones de euros y tras la finalización de las carreras la infraestructura no ha vuelto a ser utilizada. De hecho se encuentra cerrada y sin uso en la parte recayente al futuro PAI del Grao, donde está previsto que el trazado se integre como calles del nuevo barrio del Grao.

Por lo que respecta al tramo del circuito que discurre por la Marina Real Juan Carlos I, este ha sido más que nada una fuente de problemas para las nuevas empresas concesionarias que se han querido instalar en la zona porque el vial estaba blindado para uso deportivo y no se podía alterar. Para poder abrir zanjas de obra para hacer nuevas canalizaciones de servicios, las empresas tenían que solicitar permiso.

La Conselleria de Obras Públicas desbloquea ahora los usos del circuito lo que facilitará la gestión del entorno de la marina y el Grao. La conselleria de Obras Pública llevará al pleno del Consell de este viernes un acuerdo en virtud del cual se consideran finalizadas las obras de este circuito, cuyo coste se empezará amortizar este año con el pago de 7,5 millones, de un crédito de 60 millones.

El nuevo Consell, dijo Salvador, tiene voluntad de «pasar página» con la Fórmula 1 y desvincular estas instalaciones de su uso exclusivamente deportivo, como estaba contemplado en el acuerdo suscrito en 2007 con el magnate de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone. La conselleria negociará ahora con el ayuntamiento quien asume el desmantelamiento y posterior restauración de los tinglados.