El CSI·F recurrirá el acuerdo entre la ONCE de Valencia y la Interagrupación de Fallas para que los socios de las comisiones puedan vender directamente cupones de sorteos extraordinarios, al considerar que perjudica a los vendedores oficiales. El sindicato, que recurrirá el acuerdo ante el Consejo General de la ONCE, ha explicado que los vendedores oficiales trabajan más de diez horas al día por 700 euros mensuales, según indica en un comunicado.

El CSI·F defiende que sean los vendedores quienes comercialicen todos los productos de la ONCE. Además, en el caso de las fallas sostiene que el vendedor de cada zona ya se ocupa de suministrar a los socios de comisiones de su demarcación los cupones que necesitan, por lo que la demanda «está cubierta», señala.

El sindicato considera que medidas como la firmada en ese convenio «atentan» contra la estabilidad laboral de los trabajadores de la ONCE, pues les generan «una competencia añadida que les acarreará más problemas para llegar a sus ventas mínimas mensuales». Añade que el acuerdo «no supone» un apoyo a las personas con discapacidad, por lo que «se aleja» de los valores de la entidad, y que lamenta el respaldo del sindicato mayoritario, UGT, a esta actuación de la dirección. El CSI·F alerta de «las jornadas interminables de trabajo que están realizando muchos vendedores, de lunes a domingo».