A primera hora del lunes 24 de julio, el ruido de la sierra mecánica rompió el silencio en los Jardines del Turia a la altura del Palau de la Música. Se iniciaba la poda de los olivos que rodean el claustro de columnas situado en el margen derecho. Una de las primeras ramas en ser abatida fue la más larga, la que llegaba hasta arriba del todo permitiendo a una colonia de media docena de gatos que vive allí desde hace mucho tiempo refugiarse en la parte alta y bajar a alimentarse. Con la eliminación de esa rama, que era su vía de acceso, quedaron incomunicados. Un animal bajo y otros cinco, incluida una hembra con sus crías recién nacidas, arriba sin acceso a agua ni comida.

Las alimentadoras que se ocupan de esa colonia alertaron de inmediato de la situación a la Protectora Modepran y a la Concejalía de Bienestar. Decidida a impedir a toda costa la muerte de esos gatos, Modepran organizó un operativo por su cuenta. En una gran superficie compraron varios tubos y tela afelpada de superficie rugosa para improvisar una estructura por la que los gatos pudieran trepar.

El pasado viernes a primera hora de la tarde y bajo un sol de justicia se llevó a cabo la intervención, en la que participaron bomberos y agentes de la Patrulla Verde de la Policía Local. Por desgracia la tubería no ha tenido éxito y después de tres días de espera los gatos no se animan a bajar por ella.