El Parque Gulliver, que cerró al público el pasado 14 de agosto para ser rehabilitado, abre hoy sus puertas con una amplia renovación de la zona verde y del recinto de entrada.

En estos 15 días que el parque ha permanecido cerrado, los trabajadores del Organismo Autónomo de Parques y Jardines han procedido a la recuperación de un espacio que según indicó el director de conservación, Antonio Gómez, estaba «dejado de la mano de Dios». Entre las labores que han «revalorizado» la zona destaca la eliminación de vegetación invasora, el aumento del número de cipreses que lindan la zona vallada, la reparación de la red de riego, además de la resiembra del césped. La extensión ajardinada que rodea la figura de 70 metros del Gulliver cuenta ahora con 10 árboles, entre ellos 8 moreras que según explicó Gómez, responden a la «necesidad de un espacio con más sombra» demandado por los usuarios del parque.

«Nos hemos dado cuenta de la gran aceptación que tiene el Gulliver», indicó el director de conservación, ya que en las dos últimas semanas gran cantidad de personas ha intentado visitarlo.

En los más de 25 años de historia que tiene el parque, esta es la primera vez que se procede a su restauración. En el sector ajardinado apenas se perciben las baldosas de un antiguo camino que antes circulaba en el interior del espacio. Un símbolo más de la degradación a la que ha estado sometido el Parque Gulliver en los últimos años antes de ser cedido el 1 de junio a la concejalía de Parques y Jardines. El perfeccionamiento del espacio ajardinado que será visible desde hoy mismo responde a la primera fase del proyecto, que supone una inversión de 300.000 euros. La concejalía ya anunció que este presupuesto inicial incluye también la restauración completa de la figura del Gulliver que será visible entre el año 2018 y el 2019.