El Ayuntamiento de València deberá contemplar en la nueva ordenanza el uso que las bicis de alquiler realizan del espacio público, un fenómeno relativamente nuevo en la ciudad y que podría complicarse con la masiva llegada de ciclos de la compañía china Ofo. Esa joven empresa prevé usar los anclajes municipales y también la instalación de aparcabicis propios para ofrecer un servicio de arrendamiento en la calle a través de una aplicación de móvil, aunque los usuarios que lo usen podrán devolver las bicicletas en cualquier lugar.

El Ayuntamiento de València pretende que el desembarco de Ofo -primero con 400 bicis que irá aumentando progresivamente en función de la demanda- se realice con garantías y no se llegue al descontrol de otras grandes ciudades europeas donde ya tiene presencia esta empresa u otras similares. Desde el área de Espacio Público se está preparando la nueva ordenanza de ocupación de la vía pública y en breve podría ver la luz. Desde Mobilitat Sostenible deben hacer llegar las sugerencias necesarias para regular el uso de las bicis de alquiler y evitar que se pueda pervertir el uso de aparcabicis y otros espacios.

El consistorio no ve un problema la llegada masiva de bicicletas si realmente va a ayudar a conseguir un trasbordo de usuarios de vehículos motorizados a este medio sostenible -el principal argumento que esgrime la empresa impulsora-, aunque duda de que se produzca un cambio tan repentino en los hábitos y ve con preocupación la «invasión» del espacio público.

Desde València en Bici aseguran que la llegada de Ofo genera «más dudas que certezas» y advierten que puede ser un duro golpe para el gran número de pequeñas empresas de alquiler de bicis nacidas al albor del turismo. «València goza ahora de un equilibrio que se podría ver roto por la llegada de un empresa así. Lo que parece una ventaja, podría convertirse en un problema y no queremos que perjudique al colectivo, bastante demonizado ya por ciertos sectores. Pedimos una regulación clara del uso de espacio público y que se garantice que pagan sus impuestos como el resto de servicios que hacen uso de la vía pública», explicó el portavoz del colectivo ciclista, Fernando Mafé.