La concejala de Seguridad Ciudadana, Anaïs Menguzzato, valoró ayer las declaraciones de los vecinos del Cabanyal en relación a la mejora de la convivencia en el barrio, en concreto, en la denominada zona cero, donde hay mayor concentración de casas ocupados, solares degradados y delincuencia derivada de la venta de droga y donde, según los vecinos, se está notando una reducción del ruido y los altercados nocturnos.

La concejala de Seguridad destacó que las medidas de «presión policial» que se están llevando a cabo desde hace meses «empiezan a dar sus frutos». La ubicación de un retén policial provisional y disuasorio, la presencia de patrullas nocturnas en las calles, la mediación social con las familias, en especial, con las que tienen menores a su cargo y reciben ayudas sociales, así como la escolta en determinadas zonas conflictivas al servicio de recogida de enseres empieza a dar resultados y la pacificación del barrio empieza a notarse. Así al menos lo ha constatado Salvem el Cabanyal. La plataforma asegura que la zona cero «está recuperando las condiciones para una convivencia normalizada». Si las medidas se mantienen y, aunque queda mucho por hacer, se podrá definitivamente empezar a hablar de la revitalización del barrio y de la recuperación del patrimonio público, afirman.

Los vecinos crearon el pasado septiembre un grupo de ayuda mutua ante la vulneración de los derechos fundamentales a la intimidad del domicilio y a un medio ambiente saludable que se viven en el Cabanyal.