Al menos cuatro de las diez tortugas que se soltaron este año en el área de recuperación y conservación de fauna marina de El Saler, después de haber sido criadas en el Área de Recuperación y Conservación Animal (ARCA) del Mar del Oceanogràfic, han rebasado ya las Islas Baleares, con la bautizada como «Torrevieja» a la cabeza, que se dirige hacia las costas de África, según el seguimiento establecido en el Proyecto Life IP Intemares, que está reflejado en la web seatourtles.org.

De acuerdo con la última referencia de la que hay constancia de finales de septiembre, todos los animales ha registrado una notable actividad. Por un lado, los que han rebasado las Islas Pitiusas son, además de la mencionada Torrevieja, las bautizadas como Benicarló, Santa Pola y Borriana, mientras que Valencia estaba bordeando la isla de Menorca, y Vinaròs rodeó Formentera para regresar hacia el litoral en dirección al norte de la Comunitat Valenciana.

El resto de animales han enviado señales de vida localizadas mayormente en las costas de Valencia, frente a Ibiza, y en las de Tarragona, en el Mar Balear.

Del nido de Sueca

Las diez tortugas llevan acoplado un emisor de señal satélite gracias a la cual se podrán seguir sus evoluciones al menos en seis meses. Todas han sido criadas y cuidadas durante más de un año en el ARCA del Mar de la Fundación Oceanogràfic, procedentes del nido hallado en julio del año pasado en una playa de Sueca.

Durante ese tiempo las pequeñas tortugas bobas se hicieron fuertes y capaces para afrontar los riesgos en mar abierto, según sus criadores. En circunstancias naturales los animales recién salidos de los huevos entran en el mar y son víctimas de sus depredadores y de otros elementos agresivos en un 90%, con lo que este primer dato de la supervivencia de las soltadas en el Saler «prueba que el ensayo para mejorar las condiciones fisiológicas de ingreso en el mar ha sido muy positivo».