La Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio anunció que se unía a las alegaciones de los ayuntamientos en contra de la ampliación de la V-31 promovida por el Ministerio de Fomento, por considerar que prioriza el tráfico rodado e incumple la intermodalidad. Sin embargo, no todos los ayuntamientos están en contra de la ampliación. Alfafar va a presentar alegaciones si finalmente no se ejecuta el proyecto, pues considera que el Gobienro le obligó a efectuar un sobrecoste en la realización de las obras de acceso a Alfafar Park cuando Ikea decidió instalarse allí, para adecuarlas a la futura ampliación. Un sobrecoste que, en caso de no realiza la ampliación, el consistorio va a pedir que se le reintegre el dinero.

El alcalde, Juan Ramón Adsuara, recuerda que la parte que afecta a su término está ya adecuada a la ampliación. «Las obras costaron 24 millones, de los cuales el PAI donde está situado Ikea aportó 17.500.000 euros, pero el resto unos 6.5 millones más los 300.000 euros por la nueva entrada en la cooperativa de Massanassa corrió a cargo del consistorio», recuerda Adsuara (PP).

El mandatario insiste en que que Fomento le obligó a modificar el proyecto presentado alegando que «en cinco años se realizará la ampliación de la V-31». Este cambio de la planificación inicial presentado por el consistorio contemplaba el desplazamiento de puente y la ampliación de viales «lo que supuso acometer expropiaciones no contempladas inicialmente».

Por ello, ahora el abogado urbanístico del Ayuntamiento de Alfafar está elaborando un estudio para determinar cuál fue el sobrecoste exacto que supuso modificar el proyecto de accesos a Alfafar Park. «Y será ese montante económico el que pediremos al Ministerio como indemnización en el caso de que se acepten las alegaciones presentadas por el Consell y algunos ayuntamientos de l’Horta-Sud y se suspenda la ampliación de la v-31», señala.

No ve causas políticas

Además del Consell, presentarán alegaciones en contra de la ampliación de la Pista de Silla los ayuntamientos de València, Catarroja, Sedaví, Silla y Beniparrell, todos ellos gobernados por partidos de izquierdas. Son precisamente los dos municipios que mantiene el Partido Popular en la comarca de l’Horta Sud, Alfafar y Massanassa -aparte de Llocnoude la Corona- los que se muestran a favor de la ampliación impulsada por el Gobierno de Mariano Rajoy (PP). Sin embargo, Adsuara matiza que sus causas «solo son de índole económico», ya que interpreta que el ayuntamiento, y por tanto los vecinos y vecinas de Alfafar, tuvieron que hace run sobrecoste que ahor ano se verá reocompensado.

Massanassa, por su parte, no presentará alegaciones al proyecto de ampliación «pues consideramos que toda inversión que el Gobierno quiera realizar en nuestro territorio debe ser bienvenido», afirma el teniente alcalde, Paco Comes. Él fue uno de los que acudió a la reunión con la consellera de Medio Ambiente, Maria José Salvador, y asegura que «si el resto de municipios considera que se puede mejorar el proyecto, sobre todo en su apartado medio ambiental es bueno que presenten alegaciones». Por su parte, «si a Massanassa nos respetan los accesos, no tenemos problema».