La segunda gran remodelación de líneas de la EMT, que desde el pasado jueves 22 de febrero afecta a ocho líneas, parece que logrará mayor consenso entre los usuarios y, por lo tanto, minimizará los problemas que han surgido. La Empresa Municipal de Transportes hizo ayer un balance positivo de la modificación de líneas, con un incremento de viajeros del 2,3 por ciento de jueves a domingo y una puntualidad de las rutas cambiadas del 96,68 por ciento.

Desde la Federación de Asociaciones de Vecinos de València, su presidenta María José Broseta, explicó que no han tenido tiempo de analizar los cambios, pero han detectado «desinformación» de los usuarios y en algún caso «tiempos de espera mayores».

Por su parte, Apttuv, el sindicato mayoritario entre los conductores de la EMT, admite que no ha habido quejas sustanciales de sus afiliados por la modificación de líneas, «sino problemas puntuales» típicos de un proceso de estas características.

«Todavía es pronto para evaluar los cambios, pero parece que irá bastante mejor que la anterior modificación. Sabemos que había usuarios crispados, sobre todo gente mayor a la que le cuesta asimilar los cambios, pero es algo normal. Detectamos que faltaba información en las paradas el primer día, pero se ha ido resolviendo y en cuanto a frecuencias no tenemos quejas de los conductores», señalaba Gabriel de las Muelas, presidente de Apttuv.

El presidente y concejal de Mobilitat Sostenible, Giuseppe Grezzi, señaló ayer que las cifras de viajeros «eran positivas». «Las mejoras ya se notan en las líneas. Solo tres días han sido necesarios para consolidar las mejoras planteadas en la EMT y que las personas usuarias las hagan suyas. De hecho, desde el jueves hasta el domingo los datos de viajeros son positivas, con un crecimiento del 2,3 por ciento en las líneas mejoradas el jueves pasado», aseguró.

La línea que más pasajeros ha ganado ha sido la 99, cuyo itinerario conecta ahora con la Malva-rosa. De jueves a domingo ha tenido una subida del 48,3% respecto a los mismos días del año anterior, pasando de 32.592 a los 48.350 personas transportadas este año.

También ha tenido un comportamiento «muy bueno» la línea 92, donde se nota la incorporación de nuevos autobuses articulados híbridos con más capacidad y por lo tanto, con posibilidad de transportar más pasajeros. El crecimiento ha sido del 19 %.