A Gloria Tello se le confió en su día la Concejalía de Bienestar Animal del Ayuntamiento de València. Sus propias palabras fueron que acabaría con el mal estado del refugio de la la protectora Modepran, mejorando la vida de perros y gatos, pues están viviendo hacinados y el problema de que no haya espacio hace que algunos tengan que estar atados y no puedan moverse. Yo tuve oportunidad de que me recibiese en su despacho, aunque fue una charla de apenas 15 minutos pues me dijo que tenía la agenda muy completa y no podía emplear mucho más tiempo. Me dijo que ella no haría lo que había hecho el Partido Popular, es decir, desentenderse de la protectora, pero que era muy importante el dinero.

Sus promesas fueron muchas, pero a día de hoy puedo decir que me mintió descaradamente. Su partido Compromís ocupa la alcaldía desde mayo de 2015 y estamos a junio de 2018; apenas les queda un año y la situación de la protectora sigue en el mismo estado que cuando gobernaba el Partido Popular. El número de gatos y perros es muy elevado y al no disponer de ayudas, los voluntarios se las tienen que ingeniar para organizar eventos y recogida de alimentos en grandes superficies. Las facturas en intervenciones veterinarias son costosas y todos los días deben intervenir a algún que otro animalito porque ha sido atropellado al ser abandonado por lo que ellos creían que eran sus dueños.

Los voluntarios hacen un trabajo impresionante pero su vocación no es reconocida por la concejalía, porque sacar adelante a estos seres indefensos cuesta mucho dinero. El Ayuntamiento invierte en obras innecesarias como aceras de grandes dimensiones. Por encima de todo ello están estos seres que no hablan pero tenemos nosotros, los seres humanos, la obligación de defenderlos hasta la saciedad y no permitir que Gloria Tello siga al frente de la Concejalía de Bienestar animal, pues no está cualificada. Matilde Bartual Sánchez. València.