Este año hemos observado que por primera vez han facilitado ayudas de comedor a unidades familiares con ingresos de hasta 20.000 euros. Este tipo de decisiones de los políticos nos hacen pensar realmente en qué tipo de colectivos están ayudando. Yo siempre he entendido que las subvenciones de comedor eran para unidades familiares con ingresos bajos y que aquellas familias que tienen ingresos de más de 18.000 euros dependiendo de los hijos que tengan deberían costearse el comedor porque sus ingresos se lo permiten. Si este año no hubieran asignado subvenciones a familias que no lo necesitan habrían podido repartir este dinero entre las categorías con más puntos para que no supusiera un gasto a aquellas personas que realmente sí lo necesitan.