He trabajado como profesor de Matemáticas de Secundaria y Bachillerato en la Comunidad Valenciana durante 37 años. En casi todos los cursos he impartido la asignatura objeto de examen en la Selectividad y en varias ocasiones se ha producido una situación como la que ahora ha denunciado una parte del alumnado afectado y que ha alcanzado tanta repercusión gracias a las redes sociales.

El contenido de la asignatura se divide en 3 bloques. Cuando como profesor durante el curso realizo un examen de un bloque diseño la prueba de manera que el alumnado que estudia de forma normal la asignatura pueda responder a la mayoría de las preguntas para poder superar el examen y añado una pregunta algo más difícil para poder distinguir al alumnado que domina la materia de forma sobresaliente. Es decir para separar al alumnado que obtiene hasta un 8 de los que merecen un 9 o un 10. Cualquier profesor sabe que siempre puede poner algún ejercicio que la mayoría del alumnado tendrá enormes dificultades para resolver en el limitado tiempo de una prueba escrita.

Lo que sucede en este examen es que, en ocasiones, la comisión encargada de diseñar la prueba se empeña en poner EN CADA UNO DE LOS TRES BLOQUES, un ejercicio de los especialmente complicados para la mayoría del alumnado lo que les deja con pocas posibilidades de obtener una buena nota. En cursos anteriores también ha habido desacuerdo entre la comisión y una parte del profesorado que imparte la asignatura acerca de la utilización de potentes calculadoras científicas que, ahora al fin, son asequibles a todo el alumnado y que deberían aprender a utilizar.

Si a ese mal diseño, destinado a alumnado de sobresaliente, se añade que la asignatura tiene carácter troncal para el alumnado de Ciencias y que tienen que examinarse por igual las personas que quieren acceder a estudios de Matemáticas, Físicas e Ingeniería, pero también aquellos que quieren estudiar otras carreras de Ciencias con menos contenido matemático como son todas las Sanitarias, Biología e incluso Psicología.

Por supuesto que las preguntas del examen quedan dentro del contenido de la asignatura pero tal vez el nivel de dificultad de todas las preguntas a la vez es excesivo para una prueba que trata de determinar si se han entendido o no dichos contenidos de una asignatura ya aprobada y no buscar al alumnado sobresaliente. Debería haberse incluido alguna pregunta un poco más asequible para dar posibilidad al alumnado que ha sacado una nota en el intervalo [5-7]

Ahora los que tienen que reflexionar son las personas que diseñan esta prueba para los próximos cursos.