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Todas las instituciones sabían que ayer empezaba la dispensación sin receta médica de la píldora poscoital. El Ministerio de Sanidad había prometido distribuir por las farmacias tres folletos informativos. Los farmacéuticos habían solicitado un protocolo para vender el medicamento. El conseller de Sanidad anunciaba ayer mismo la necesidad de dar mucha información a los boticarios para que éstos la transmitieran a la población interesada en el fármaco. Pero lo cierto es que a Begoña Alfonso, con una farmacia en la Avenida Aragón de Valencia, le tocó ayer vender a una menor la píldora del día siguiente sin folletos, pautas ni norma alguna. «Le dije lo básico: que no tenía efecto pasadas las 72 horas del acto; que si vomitaba no surtiría ningún efecto; y que no era un método anticonceptivo, sino una solución de emergencia para una metedura de pata», cuenta.

Todavía tuvo algo de suerte la angustiada joven, ya que la improvisación marcó ayer la entrada en vigor de la norma. Ninguna de las doce farmacias de Valencia, Torrent, Sueca, Gandia y Xàtiva consultadas ayer por este diario había recibido los folletos del ministerio para hacer pedagogía de la píldora. «Sólo sé lo que he visto por la tele», admitía una boticaria de la capital de la Costera. Y de ese modo, el resultado podía ser el de la botica de la Avenida de Aragón, o el otro que experimentó Levante-EMV en una farmacia de Ciutat Vella. El periodista pidió la píldora poscoital y se la vendieron como una aspirina: sin preguntas, consejos ni información pedagógica. Cobraron algo menos de 20 euros por el comprimido y dijeron hasta luego al cliente.

Cabía incluso una tercera posibilidad: una farmacia de las afueras de Valencia explicó al fotógrafo de este diario que no pensaba dispensar sin receta médica ninguna píldora poscoital hasta recibir «el visto bueno del colegio de farmacéuticos», lo cual no es necesario.

Todo indica que esta actitud tan variable tiene los días contados. El conseller de Sanidad, Manuel Cervera, anunció ayer que su departamento va a elaborar un tríptico sobre la píldora poscoital en el que incluirá los centros de planificación familiar donde las mujeres pueden solicitar más información, así como la explicación de que la píldora no es un método anticonceptivo.

El contenido de este folleto informativo se consensuará con los colegios farmacéuticos de Valencia, Alicante y Castelló, cuyos presidentes se reúnen hoy mismo con el conseller de Sanidad. De todos modos, la conselleria ha querido resaltar que la agenda del Gobierno central no es la suya. Y por tanto, que «ante la modificación del protocolo de administración de este fármaco y su liberalización para la venta en farmacias, la conselleria de Sanidad apuesta por mantener su postura anterior y seguir haciendo hincapié en que no es un método anticonceptivo, que no debe ser usado nunca como algo habitual y seguir remitiendo a las pacientes a centros de Salud Sexual y Reproductiva para que reciban la información necesaria», según precisaron desde la conselleria.