Las condiciones laborales de los profesionales de enfermería en Castelló se han precarizado en los últimos años, según se desprende de un estudio realizado por el Sindicato de Enfermería Satse en todas las comunidades autónomas. Así, a la reducción salarial efectuada en 2010, que se mantiene con la congelación de 2011 y 2012, se une, por ejemplo, la negativa a sustituir a los profesionales que caigan enfermos, lo que "generará estrés y repercutirá negativamente en la asistencia que ofrecen a los usuarios", según una nota de prensa del sindicato.

La anunciada reducción del 5 por ciento en los salarios no es tal, explican desde el Sindicato de Enfermería, sino mucho mayor, superior al 20 por ciento por término medio, ya que las comunidades están incidiendo en la reducción del sueldo base "obviando, conscientemente, el resto de partidas que también forman parte del salario mensual y que, en muchos casos, se ha congelado, reducido o, simplemente, desaparecido".

"A la reiteradamente denunciada carencia de profesionales de enfermería en los centros asistenciales o al hecho de que no se cubran sus bajas o sus vacaciones hay que sumar otros aspectos que están repercutiendo gravemente en las condiciones laborales y profesionales del colectivo enfermero y, también, en la calidad del servicio que se ofrece, que ha disminuido", añade Satse. Así, explican desde Satse, en muchas comunidades autónomas, durante los procesos de incapacidad transitoria por enfermedad común o accidente no laboral no se complementarán las prestaciones económicas que se reciban de la Seguridad Social, a excepción de algunos procesos que requieran intervención quirúrgica u hospitalización.

De igual forma, explican desde el sindicato, los profesionales de enfermería se verán afectados también por el hecho de que no se procederá, en la mayoría de los casos durante 2012 y 2013, a la incorporación de nuevo personal, ya que sólo se permitirá la contratación en casos excepcionales y para cubrir necesidades urgentes e inaplazables. En algunas comunidades la reposición de personal se somete al control mensual de la consejería de Hacienda, por lo que "ya no importa tanto si el personal es necesario o no, sino simplemente si hay dinero para contratarlo".

También existen comunidades en las que se han producido otro tipo de recortes, como reducir los días de descanso adicionales, aumentar la jornada laboral, limitar o eliminar las sustituciones y lo que es peor, en opinión del Sindicato de Enfermería, la suspensión de acuerdos de forma unilateral por parte de las distintas administraciones. Estas medidas de recorte, "que no de ajuste", se están llevando a cabo, además, sin contar con los sindicatos, "representantes legítimos de los trabajadores, que ven cómo se están modificando las condiciones laborales, de forma unilateral por parte de las administraciones públicas, y retributivas de los empleados públicos sin que puedan hacer nada". Esto, en palabras de Satse, supone tanto un "desprecio a los representantes de los trabajadores como a los propios profesionales que les eligieron para que les representasen ante las distintas administraciones".