«Era un partido peligroso y lo supimos jugar»

No hay partido fácil en la Tercera valenciana y ayer la visita del líder al campo del colista sirvió de claro ejemplo. Solo pudo ganar el Atlético Levante al Utiel en los últimos minutos, un resultado que ensalza el valor de lo efectuado por el Castellón, segundo, en el campo del penúltimo. El viento, la estrechez y el césped seco y alto condicionaron el partido de los albinegros en La Nucía. Con final feliz: «era peligroso y lo supimos jugar», destacó el entrenador Ramón María Calderé al término del encuentro, tras alabar la «practicidad total» de sus jugadores.

Estaba la tarde para pocas florituras. «Para jugar está Castalia», dijo Calderé. «Sufrimos algo en el primer tiempo, pero el equipo supo manejar los tiempos del partido». El entrenador catalán del Castellón instó a su equipo a «seguir haciendo lo que tenemos que hacer», esto es, «no fallar y esperar que fallen». Calderé considera que su equipo está listo para las grandes citas que se avecinan, con seis partidos de Liga en pugna por el título y la posterior promoción de ascenso. «Solo tenemos que variar algunos aspectos, algunos fallos infantiles, como hoy (por ayer), ese balón perdido en el descuento del primer tiempo que ha obligado a Álvaro a hacer una gran parada».

Calderé destacó la labor de Rubén Suárez, otra vez determinante. «Rubén no se conforma y hay que felicitarle. Esa posición le va a las mil maravillas». Desde que juega de segundo punta, Rubén lleva 7 goles en las últimas 5 jornadas.

La siguiente cita liguera será en Castalia, el domingo contra el Alzira, después de la vuelta de Copa Federación prevista para el jueves en Irún. «Cuidado con el domingo», avisó Calderé, «que la Copa a veces pasa factura. El Real Unión ha perdido. Es un viaje largo y el Alzira es un rival complicado. Pido el apoyo de la afición porque por el cansancio podemos sufrir». En previsión, el técnico está repartiendo los minutos de Copa y Liga entre toda la plantilla. «No quiero excusas», sentenció.

Meter presión

El protagonista del duelo fue Rubén Suárez, líder del grupo en goles y asistencias, y también en lo intangible. «Debemos seguir con la misma ilusión», declaró, «Es momento de apretar y estamos ahí, metiendo presión. Más allá de marcar, estoy contento porque estamos dando imagen de equipo sólido. Era un partido trampa y nos vamos felices con los tres puntos».

Ilusión y felicidad son los términos que más se repiten en el discurso de Rubén, que recomienda a sus compañeros de disfrutar por la oportunidad de jugar por ser campeón. «Me da igual la categoría que sea, no es fácil ser campeón. Debemos disfrutar de estos partidos», explicó.

Eso intenta hacer su compañero Roger Canadell, que ha recuperado protagonismo en las últimas semanas. «Queremos ser primeros y subir a Segunda B como sea», dijo Canadell tras un partido «difícil de jugar». Cana ve posibilidades en Irún («iremos con ilusión, en la ida se vio que podemos remontar») y alabó a Rubén («es un lujo y un orgullo, hace mejor al equipo»).