Las collas infligen una primera derrota a López y complican su reelección

La Federació de Colles de Castelló infligió ayer una primera derrota a Jesús López y complica su reelección como presidente de la Junta de Festes. Los 15 representantes que corresponden a las collas en la asamblea de fiestas del sábado votarán por Javier Gimeno, que fue la candidatura elegida en una votación interna celebrada ayer en la Cámara Agraria.

En las elecciones de la Junta de Festes participarán 133 electores procedentes de diversos ámbitos de la fiesta. Las collas, con 15, cuentan con el mayor número de votantes tras las gaiatas (19), con lo que el resultado de ayer supone un duro revés para el que ha sido presidente de la junta en los últimos 14 años. Asimismo, también emitirán su papeleta los últimos cinco presidentes de la Federació de Colles.

López comprobó la importante pérdida de influencia en uno de los sectores claves del «món de la festa» como las collas. Sólo obtuvo 16 votos de 121 (un 13%) en la asamblea de la federació y fue la tercera preferencia de los cinco candidatos que se presentan a la junta. Gimeno cosechó 48 escrutinios (un 39 %); Juanvi Bellido, 36 (29 %); Fernando Andreu, 10 votos (8%), y Francisco Jáuregui, 4 (3% ). Hubo dos votos nulos y otro en blanco.

Entre las collas se daba por descontado al finalizar el acto que la presidencia de fiestas será cosa de Gimeno y Bellido, y que López apenas tiene posibilidades de repetir. Parecía que Bellido partía con ventaja, pero tras la elección de las collas se erige Gimeno como principal aspirante.

Antes de la votación hubo intervenciones de las candidaturas. El aún presidente en funciones no tuvo pelos en la lengua y arremetió contra la nueva estructura del patronato y contra supuestas injerencias del gobierno progresista. Lamentó que con el patronato la Junta de Festes pierde el control de las contrataciones y de la organización y se queda con un papel protocolario. Se erigió así en un salvador de la independencia festera y obvió que el patronato nació con los gobiernos del PP como consecuencia de la ley de Grandes Ciudades, que obliga al ayuntamiento a asumir la función económica de la fiesta al provenir el 80 % de sus fondos del presupuesto municipal. «Las competencias las tiene ahora el patronato, donde la mayoría la tiene el PSOE y alguno de Compromís», afirmó López, que destacó que se presenta «para que las fiestas no se politicen». «Me lo han pedido colectivos. La junta poco a poco irá desapareciendo y el patronato hará el programa», insistió López, que aseveró que ya se vislumbró un primer paso de este cambio cuando se quedó sin hablar en el acto de imposición de bandas. Estas palabras no fueron bien recibidas por muchas collas, que afirmaban no entender su intención de presentarse si considera que la junta apenas tiene funciones.

Los discursos del resto de candidatos fueron más contemporizadores. Gimeno y Bellido se proyectaron como personas de consenso, aunque el primero reprochó a otros aspirantes que no hayan hecho público su equipo. Bellido propuso la creación de una oficina técnica y jurídica para asesorar a las collas y la celebración de un homenaje al vicepresidente de la federación fallecido, José Joaquín Malave. Abogó por recuperar «el protagonismo del pueblo» y se comprometió a sumar a su gestión a todos los colectivos.

Por su parte, Jáuregui apostó por «más transparencia y diálogo», mientras de parte de Fernando Andreu habló Juan Serrano, quien planteó medidas para mejorar los carros engalanados.