Recuerdos pintados de una tradición artística de la Vall d'Uixó

El arte sobrevive al paso del tiempo y en muchas ocasiones se convierte en testimonio del pasado. Precisamente por ello, la inauguración ayer de una exposición pictórica tuvo especial interés para la Asociación Arqueológica de la Vall d'Uixó, que decidió rendir homenaje a una iniciativa que de haber perdurado habría cumplido 25 años: el Club 72.

En la Vall d'Uixó existen multitud de inquietudes artísticas, pero la pintura cuenta con numerosos representantes que en su día, como consecuencia de la imposibilidad de organizar exposiciones en condiciones dado que en la ciudad no había galerías de arte, decidieron unirse, constituirse en asociación y alquilar un local en la calle García Esbrí. Así nació en 1972 Expo d'Art, como recuerda Miguel Montesinos, pintor y miembro de la asociación arqueológica.

Durante el tiempo en que los miembros del colectivo desarrollaron su actividad no solo organizaron exposiciones, tanto colectivas, como individuales o antológicas, sino también excursiones, encuentros gastronómicos y concursos, uno de ellos patrocinado por Constantino Carda, conocido en la ciudad por regentar Autoescuela Tino, explica Montesinos.

Pero a pesar del entusiasmo inicial, la intensidad de las actividades se difuminó y Expo d'Art desapareció, aunque no sucedió lo mismo con las ilusiones de sus integrantes, que años después, en 1990, volvieron a reunirse constituyendo la heredera de la primera asociación, en este caso bajo el nombre de Grup 72.

En este resurgir de la agrupación artística volvieron a convocarse concursos de pintura y cartel, «una vez al año hacíamos un homenaje a un pintor local y a otro nacional», pero sobre todo, se aprovechó la oportunidad que brindaba que, casi veinte años después, existieran hasta tres salas de exposición distintas, la de Caixa Rural Sant Isidre, del ayuntamiento y de Fundació Bancaixa. Cinco años duró el impulso y las ganas, «pero la gente se disgregó creyendo que era una buena época para exponer en solitario", señala Montesinos, "creímos que la gente joven cogería el relevo, pero no fue así».

Los artistas quedaron, porque son muchos, tantos los veteranos como los jóvenes, los que enriquecen el panorama pictórico local, pero Grup 72 también se quedó con las ganas de seguir reivindicando el talento de la ciudad y de la comarca, ya que en la segunda etapa también se sumaron pintores de otras localidades vecinas.

Homenaje con 26 obras

Muchos años después, Miguel Montesinos y Francisco Royo, los dos integrantes de ambas asociaciones artísticas y hoy en día de la junta de la Asociación Arqueológica, propusieron realizar un homenaje a Grup 72, que ayer por la tarde fue una realidad. En total se recogen 26 obras de otros tantos pintores pertenecientes a esa asociación, según explica el presidente de la Arqueológica, Fernando Martínez, además de varios trabajos de artistas jóvenes.

La muestra rinde especial homenaje a siete de los miembros de Grup 72 ya fallecidos, Vicente Castelló Segarra Sau, José Abad Melchor El Peix, Manuel Barberá Pascual, Faustino Falcó Orenga, Vicente Beltrán Antonino, José Martí Serra y José Carvajal Delgado, algunos de ellos desaparecidos muy recientemente, cuyas obras expuestas han sido seleccionadas por sus familias.

Tanto Martínez como Montesinos reconocen que en esta muestra, que estará abierta hasta el día 13 de mayo en el Palau de Vivel, existe un doble objetivo. Por un lado, recordar la existencia de esta asociación artística, y por otro, llamar la atención de las nuevas generaciones de pintores para que reconozcan la importancia de estar unidos, defendiendo como colectivo con más fuerza, lo que a título individual suele resultar más complicado: que el arte desborda en esta ciudad y que el paso del tiempo debe de servir para aprender de las experiencias que lo enriquecieron y lo potenciaron.