La Muy Alta Tensión impacta en una zona poblada de Atzeneta y en parajes naturales

La provincia de Castelló parece despertarse ahora sobre el posible impacto que va a tener el proyecto de una nueva línea de Muy Alta Tensión (MAT) de doble circuito de 400 KV entre Morella y Almassora. Aunque partidos como Compromís y plataformas como la de No a la MAT Vilafamés llevan ya meses alertando de las posibles incidencias en el paisaje y en la población, la publicación el pasado mes de abril en el BOE de las parcelas afectadas ha sorprendido a numerosos propietarios de Almassora, Castelló, Borriol, Sant Joan de Moró, Vilafamés, Vall d'Alba, Les Useres, Culla, Atzeneta, Torre d'en Besora, Benassal, Vilafranca, Ares, Castellfort, Cinctorres y Morella.

Atzeneta acogió la noche del martes una reunión de la Plataforma No a la Mat Comarques del Nord, en la que más de un centenar de personas debatió sobre un proyecto de Red Eléctrica Española que plantea invertir 44 millones de euros en el refuerzo de la red que conecta con Francia, «pero del que aquí no se va a ver beneficio alguno», señala Juanma Segarra, representante de Compromís en la reunión. El proyecto, según explicaron en este encuentro, se limita a instalar torres de hasta 70 metros de alto para transportar energía desde Francia al norte de África, y lo que en el país galo va de manera soterrada y con un menor impacto, «aquí va en superficie porque les saldrá más barato».

El trazado propuesto por Red Eléctrica -empresa que tiene un elevada participación del Estado- atraviesa 17 términos municipales y, según el manifiesto suscrito por los asistentes, «afecta a lugares emblemáticos como la Serra de Borriol, Vilafamés, la Mola de Ares» y espacios de la Red Natura 2000 del Alt Maestrat y de Els Ports. Recalcan en ese sentido el impacto en los Parajes Naturales Municipales de la Mola d'Ares, el Mollet (Sant Joan de Moró) y la ermita de Sant Miquel (Vilafamés), «que son citados como espacios a evitar en el estudio de impacto ambiental».

Otro de los aspectos que denuncian desde la plataforma es que el trazado aprobado «atraviesa zonas pobladas como la del Pla de Meanes, de Atzeneta, donde viven120 personas, sin respetar la distancia mínima de seguridad actualmente recomendada», señala el manifiesto.

El texto, suscrito por formaciones como PSPV, Compromís, Castelló en Moviment, Podemos, profesionales de la sanidad y particulares, incide en que estas viviendas próximas a la Muy Alta Tensión «estarían expuestas a todas les afecciones negativas de las líneas eléctricas, especialmente de los campos electromagnéticos, altamente perjudiciales para la salud, como lo demuestran numerosos estudios científicos que relacionan éstos con una mayor incidencia de enfermedades».

A juicio de la plataforma, «no se han estudiado adecuadamente los efectos sobre el medio natural y socioeconómicos, el impacto sobre el turismo y las zonas recreativas ni las consecuencias sobre el patrimonio, además de que «supondrá la pérdida de valor de los terrenos afectados».

Aunque formaciones como PSPV y Compromís y organizaciones como Ecologistas en Acción sí presentaron alegaciones hace un par de meses, lo cierto es que muchos propietarios se han visto sorprendidos por el proyecto ya en marcha, «de ahí la dificultad de paralizarlo, aunque no pararemos hasta que nos escuchen, si es necesario en Europa», explica Juanma Segarra.

Con todo ello, el manifiesto acaba con varias peticiones. Por un lado, solicitan a las administraciones implicadas «que desestimen o impidan la ejecución del proyecto en los términos en los que está actualmente redactado, en defensa de futuro de nuestras comarcas, de la salud de sus habitantes y del medio ambiente».

Reclaman además que se evalúe de manera seria «la necesidad real de las líneas de Muy Alta Tensión» y, en el caso de que el proyecto se ejecute, «se cambie por un trazado de menor impacto social y ambiental, incluso contemplando el soterramiento».