El Col·lectiu Universitat Jaume I per la Llengua i la Cultura (CULC) emitió ayer un comunicando afeando la postura del Consell Social en contra de la exigencia del valenciano para la obtención del título universitario acusándolo de ser «cómplice» de que el valenciano siga siendo una lengua minoritaria. Además, aseguran que este comportamiento evidencia un «menosprecio» hacia el valenciano «por considerarla una lengua prescindible y no necesaria para la docencia ni para la vida social y económica». Asimismo, y ateniéndose a los estatutos de la universidad, afirman que el Consell Social es un órgano asesor y que la aprobación del nuevo plan de estudios correspondería únicamente al Consell de Govern.

El Consell Social votó en contra de su aplicación en al plan de estudios del Grado de Enfermería, el primero que se sometió a votación argumentando que la exigencia del C1 de valenciano (mitjà) podría frena la internacionalización de la universidad y su expansión, teniendo en cuenta que es la universidad de la Comunitat con mayor número de alumnos extranjeros.

No obstante, el CULC (integrado por alumnos, sindicatos, profesores y asociaciones) tumba dicho argumento asegurando que el 94,5 por ciento de los estudiantes proceden del territorio lingüístico y entienden el valenciano y que, en el curso actual, solo 3 de los 231 estudiantes de Enfermería son de fuera del dominio lingüístico.

Con todo, y ateniendo al 5 por ciento de los universitarios que han estudiado fuera de la Comunitat Valenciana, el colectivo lingüístico apunta que se darán las «máximas facilidades» para que obtengan la acreditación. «Cuando un estudiante demuestre que ha estudiado en sistemas educativos diferentes de los del las comunidades de lengua catalana, solo tendrá que acreditar un nivel de conocimientos orales A2 de valenciano, y se supone que después de haber estudiado cuatro años en la UJI, un estudiante de fuera será capaz de aprobar este nivel de mínima exigencia», explican.

En cualquier caso, el CULC añade que la UJI «facilitará todos los medios necesarios para la formación de los estudiantes» en este sentido.

Por otro lado, el Col·lectiu Universitat Jaume I per la Llengua i la Cultura reprocha al Consell Social que no hubiera puesto problemas a la exigencia del B2 de inglés y sí al C1 de valenciano cuando este nivel «lo tendría que tener cualquier estudiante al acabar bachillerato». «Esta negativa solo se explica desde el menosprecio más absoluto hacia la lengua por considerarla prescindible», añaden.

Cabe recordar el Consell de Govern de la UJI ha suspendido de manera temporal el requisito del C1 de valenciano (mitjà) como condición necesaria para la obtención del título y acordó consultar con los servicios jurídicos si el informe del Consell Social en contra de esta exigencia es vinculante o no. Según el CULC, el Consell Social sería un mero órgano consultivo y su votación no sería vinculante. De ser así, el Consell de Govern procedería a aprobar el nuevo plan de estudios sin más problemas.