Un cazador ha muerto este fin de semana al recibir un disparo fortuito de un compañero, en el municipio turolense de Cañada de Beñatanduz, según ha informado la Guardia Civil.

La noche del 18 de enero entró en la central de la Benemérita un aviso alertando de que un cazador había resultado herido por un disparo fortuito de uno de los dos compañeros que estaban con él.

El disparo le alcanzó en el vientre y fue trasladado al Centro de Salud de Vilafranca (Els Ports) y, de allí, evacuado al Hospital de Castelló. Sin embargo, finalmente falleció a consecuencia de la herida.

El Ayuntamiento de Culla ha decretado dos días de luto oficial y mostró sus condolencias a los familiares del fallecido.