El líder del PP, Mariano Rajoy, ha asegurado hoy que el president de la Generalitat, Francisco Camps, no le ha mentido en estos últimos días y que por ello mantiene en él "el mismo nivel de confianza" de siempre, de tal modo que ha expresado su deseo de que repita como candidato en Valencia en 2011.

Rajoy, además, ha afirmado que no tiene "ninguna duda" sobre "la honradez personal" del ex secretario regional valenciano Ricardo Costa, toda vez que ha trabajado siempre por "el bien" de la organización, pero al ejercer el cargo que ejerció hasta ayer estaba obligado a soportar "un plus de exigencia" en su comportamiento y en su conducta.

El líder del PP igualmente ha indicado que fue Costa quien ante el Comité Ejecutivo regional del partido en Valencia pidió la "suspensión de sus funciones" y que lo mismo hizo un día después ante el grupo parlamentario en Les Corts. Ambas afirmaciones de Rajoy contradicen lo que declaró el propio Costa el pasado martes, cuando tras la reunión de la Ejecutiva negó su cese.

Según ha precisado el presidente del PP, también fue Costa el que pidió comparecer ante el Comité de Derechos y Garantías, una solicitud que podría suponer una investigación interna a su gestión, pero tal extremo no lo ha aclarado Rajoy.

Aunque no ha explicado con detalle por qué se ha destituido a Costa, ha insinuado que la razón radica en que no ha sabido atender ese "plus de exigencia" ni la "ejemplaridad" acorde a una Secretaría Regional.

Como quiera que en la dirección nacional se consideraba "poco ejemplarizante" lo que sucedía en Valencia, el líder de los populares ha anunciado que impulsará un "código de buenas prácticas" que mejore la transparencia de la gestión del partido.

Hacía seis meses que el presidente de los populares no comparecía ante los medios de comunicación, y por ello, la sala de prensa estaba abarrotada.

De esa rueda de prensa, el presidente valenciano, Francisco Camps, sale reforzado, ya que, además de que no le ha mentido y conserva su nivel de confianza, Rajoy ha manifestado que quiere que siga como presidente del PP valenciano y de la Generalitat, y por tanto, que repita como candidato en las elecciones autonómicas de 2011.

También ha recordado que la causa contra Camps por supuestamente haber recibido dádivas de la trama Gürtel está archivada y que desde entonces no ha aparecido "ningún elemento nuevo" ni actuación novedosa que para la dirección nacional sea motivo de su cese.

Ha insistido en que ordenó cortar con las empresas de la trama Gürtel en 2004, cuando detectaron que "algunos estaban utilizando su relación con el PP y el buen nombre del partido en beneficio propio".

Rajoy transmitió esas instrucciones al gerente y al tesorero de su partido para que la hicieran llegar a las direcciones regionales y provinciales.

"Después he conocido que algunas personas siguieron contratando" ha continuado Rajoy, que ha puntualizado que si en Valencia continuaron contratando a Orange Market fue porque "creyeron que esa empresa se había desgajado" de la trama.

Ha recalcado además que los responsables de estas empresas lograron mantener "cierta actividad profesional" con algunas comunidades y ayuntamientos "o bien ocultando su auténtica identidad, o a través de contactos no institucionales sino estrictamente personales".

Asimismo, el líder del PP ha dejado claro que "la trama Gürtel no tiene nada que ver con la estructura orgánica" de su partido y que con tales empresas sólo mantuvo "relaciones estrictamente comerciales", "absolutamente legales y que han sido fiscalizadas".

Ha defendido su respuesta política a los hechos investigados, y así, ha afirmado que ésta se ha caracterizado por un "nivel de exigencia sin parangón en la vida pública española".

Tras recalcar que como presidente del PP no aceptará "conductas que puedan avergonzar a ningún militante o votante del partido", ha subrayado su fe en "la ejemplaridad de la vida pública" y ha anunciado la configuración de un código de buenas prácticas que en la medida de lo posible impida casos como los que describe el sumario del caso Gürtel.

Rajoy ha ensalzado la importancia de que el PP se consolide como alternativa al Gobierno, y más en tiempos de crisis, y ha censurado el "uso sectario y partidista" que a su juicio ha hecho el Gobierno de las instituciones del Estado para dar una "imagen distorsionada e irreal" de su partido.

CÓDIGO DE CONDUCTA

Rajoy ha asegurado que no consentirá dentro de su partido conductas que "avergüencen" a sus miembros y a los militantes, y ha anunciado la presentación de un código ético de buenas prácticas para su formación que irá más allá de lo legalmente establecido.

Ante una inusual presencia de periodistas dada la gran expectación que ha provocado esta rueda de prensa, Rajoy, que no comparecía en la sede nacional de su partido desde abril, ha dicho también que no permitirá que el Gobierno utilice el "caso Gürtel" como "parapeto" para eludir sus responsabilidades.

La comparecencia se ha producido un día después de que el secretario general del partido en la Comunidad Valenciana, Ricardo Costa, fuera destituido de este cargo y como portavoz del grupo popular en Les Corts Valencianes.

"NO ME HE DEJADO LLEVAR POR PRESIONES"

El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha asegurado hoy que ha actuado "con prudencia y sin precipitación", en su partido en relación con el caso Gürtel, y ha subrayado que no se ha "dejado llevar por las presiones de nadie".

Rajoy ha hecho esta afirmación en una multitudinaria rueda de prensa, la primera que ofrece en la sede nacional del PP en seis meses, en la que ha comparecido acompañado por la plana mayor del partido y en la que se le ha preguntado por si el caso Gürtel ha vuelto a poner en duda su liderazgo o lo ha reforzado. "Ya sabe que mi situación natural es de equilibrio, creo que es muy importante", ha sido la respuesta de Rajoy.

Sin embargo, Rajoy no ha sido tan escueto al responder a otra pregunta sobre si cree que ha administrado bien los tiempos a la hora de tomar decisiones desde que aparecieron las primeras informaciones del caso Gürtel que afectaban a miembros del PP.

Antes de defender su actuación, Rajoy ha recordado que, como presidente del PP, es a él al que corresponde "tomar las decisiones" y quien tiene "la mayor responsabilidad".

"He actuado con prudencia y sin precipitación, creo que he actuado cuando tuve suficiente conocimiento de causa de lo que había ocurrido. No me he dejado llevar por las presiones de nadie. Insisto, no me he dejado llevar por las presiones de nadie. Como siempre, he tomado las decisiones en los tiempos que a mí me parecen oportunos", ha señalado.

Ha añadido que ha procurado "no ser arbitrario ni injusto, porque estamos hablando de personas, de seres humanos" y "aunque haya podido cometer errores o más que errores" y que ha actuado "siempre en el interés general" de su partido, y no en interés particular de Rajoy".

"Hay otros que no tienen por qué tener en cuenta el interés general del PP. Yo sí, soy el principal obligado, porque para eso soy el presidente del PP", ha asegurado Rajoy antes de agregar un matiz más: afirma que tampoco ha caído en la trampa de encerrarse en el caso Gürtel y no dar la batalla a un Gobierno "desnortado" con la crisis, el asunto que más preocupa a los ciudadanos. "Por eso, aunque todo es muy discutible y opiniones puede haber muchas, estoy convencido de lo que hice", ha concluido.

Preguntado por si no hubiera sido más eficaz que las decisiones en relación con el caso Gürtel hubieran sido adoptadas por la dirección nacional y no por las de Madrid o Valencia, Rajoy ha defendido la necesidad de adecuarse y respetar los estatutos del partido, aunque ha dicho también que "como es natural" y "evidente" habló con Esperanza Aguirre y Francisco Camps