El Consell tratará de aliviar la asfixia de las empresas proveedoras eximiéndoles del pago de tributos y sanciones económicas mientras existan facturas pendientes. La fórmula de "compensación de deudas" viene recogida en el decreto-ley de medidas urgentes de apoyo a la iniciativa empresarial y a los emprendedores, microempresas y pequeñas y medianas empresas (pyme) de la Comunitat Valenciana aprobado ayer por el pleno del Consell. El paquete de medidas, con el que se pretende promover la actividad económica, ve la luz una semana después de que el Ejecutivo valenciano aprobara un "tijeretazo" de más de 1.000 millones de euros que ha puesto en armas a los empleados públicos.
El decreto-ley está centrado en las pequeñas y medianas empresas que viven una situación de extrema debilidad por la crisis y los impagos de las administraciones públicas. Para aliviar la presión a la que están sometidas las empresas y, en particular, los proveedores, el Ejecutivo que preside Alberto Fabra ofrecerá a éstos la posibilidad de condonar sus deudas tributarias o de otra índole en el caso de que el Consell les deba dinero. Esta vía permitirá al Ejecutivo valenciano reducir el volumen de pagos pendientes aunque sea a cambio de reducir la recaudación. En realidad, la fórmula de compensación de deudas viene ya reconocida en el Reglamento General de Recaudación, norma de carácter estatal, si bien, tal como reconoció el vicepresidente del Consell, José Císcar, se trata de una práctica poco habitual. "Pretendemos que ahora sea tónica habitual", dijo Ciscar que, incidió, en que al incluir la fórmula en la normativa valenciana se busca "reforzar las garantías a favor de nuestras empresas". Hasta ahora la compensación de deudas era posible sólo vía tributos. Con la nueva legislación valenciana se podrá aplicar en los casos de deuda de naturaleza no tributaria, como pueden ser multas.
No es la única ventaja fiscal que podrán disfrutar los emprendedores. El decreto contempla que aquellas personas que abran un negocio un negocio en 2012 estarán exentos de pagar tasas autonómicas el primer año de actividad y contarán con una bonificación del 50 por ciento el segundo año. Esta exención afectará, según el Consell, a 41 tasas para el primer ejercicio. A los incentivos fiscales para apoyar la creación de empresas se añade una serie de propuestas que tienen como objetivo aligerar la burocracia. De hecho, se contempla la posibilidad de que la concesión de licencias municipales de apertura de actividades comerciales pueda ser instantánea cuando hasta ahora la duración media estimada oscilaba entre tres y cinco meses, dependiendo del ayuntamiento. Para beneficiarse de esta tramitación exprés, los interesados deberán presentar una declaración responsable del emprendedor, una copia del resguardo del abono de las tasas municipales y un certificado final de obra firmado por técnico competente y visado. En el caso de que la implantación de la actividad no requiera de la ejecución de obras, se acompañará un proyecto o, en su caso, memoria técnica de la actividad correspondiente.
La nueva regulación también beneficiará a actividades sujetas a la Ley de Espectáculos Públicos, Actividades Recreativas y Establecimientos Públicos de la Generalitat, como bares, cafeterías, pubs, restaurantes, ludotecas y supermercados, siempre que su aforo no sea superior a 500 personas. Para ello, se debe acompañar a la declaración responsable de un certificado expedido por una entidad que disponga de la calificación de Organismo de Autorización Administrativa (OCA). Al respecto, Císcar ha anunciado que el Consell aprobará, en el plazo máximo de 12 meses, la regulación para la creación de las OCA. Si no dispone de la certificación de un OCA, el plazo máximo para la concesión de la licencia es de un mes. Así, "en el peor de los casos, para actividades cuya licencia de apertura está tardando uno o dos años, en algunos casos el plazo máximo será de un mes", explicó el también portavoz del Consell.
Por otro lado, la tramitación de la licencia de obras y la de apertura será conjunta y en un solo expediente administrativo. A este decreto ley van asociadas un total de 30 líneas de ayudas directas por un importe de más de 85 millones de euros. El Consell hizó hincapié en que todas ellas están ya contempladas en los presupuestos de la Generalitat para 2012 Entre ellas, destacan algunas como las dirigidas a desempleados que se constituyan en trabajadores autónomos y profesionales y las referidas a estabilidad en el empleo de jóvenes emprendedores menores de 30 años mediante autoempleo. Por otra parte, se creará el Consejo Valenciano del Emprendedor como órgano máximo de coordinación.
Cinco asesores para Ciscar
Por otro lado, el pleno del Consell aprobó el nombramiento de Virginia Jiménez como nueva subsecretaria de la Conselleria de Educación. Jiménez, hasta hace poco era directora territorial de Educación en la provincia de Valencia, sustituye a Jesús Marí que se ha ido con Císcar a la subsecretaría de Presidencia. Císcar se lleva también a Presidencia a dos conductores, como personal eventual, así como tres asesores, entre ellos su jefa de gabinete, el responsable de prensa y un asesor.
Ciscar dice que se ha ahorrado 52 millones más de lo previsto
El plan de contención del gasto aprobado por el Consell el pasado mes de julio, con el que pretendía ahorrar 680 millones de euros, ha permitido finalmente un ahorro 52 millones superior al previsto. Al menos, así lo afirmó ayer el vicepresidente del Consell en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consell. El portavoz defendió las medidas de ajuste llevadas a cabo por el Consell, entre ellas la reducción en más de un 6% de los presupuestos de la Generalitat en 2011. Ciscar mantuvo que a pesar de las críticas y de las dificultades, la Comunitat Valenciana "está haciendo los deberes" y, por ello, no temen ningún control a priori o a posteriori de las cuentas autonómicas por parte del Gobierno central. "La Generalitat no puede ser un lastre para el crecimiento sino impulsor y motor", señaló.
