La directora del IES Lluís Vives, Carmina Valiente, se reunió ayer con la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Paula Sánchez de León, para pedirle que se «depuren responsabilidades a quien toque» ante la «desmesurada» actuación policial en las protestas estudiantiles y «se limpien los expedientes abiertos» a los detenidos. La directora aseguró que la Policía Local «tuvo que pedir moderación» a los antidisturbios ante el cariz que cogían los acontecimientos.

Valiente se pronunció en estos términos después de reunirse con la delegada del Gobierno y posteriormente con el Síndic de Greuges, José Cholbi, junto al representante del Ampa, Josep Belda, quien apuntó que Sánchez de León se comprometió a «estudiar los casos e intentar buscar responsabilidades» porque «sí entienden, por la cantidad de imágenes, que hay indicios de una actuación desproporcionada».

Asimismo, señaló que la delegada les expresó que la limpieza de expedientes «tiene su complejidad una vez se ha iniciado el procedimiento en los juzgados» que «hará todo lo posible para que esos expedientes se minimicen y que en la medida de lo posible no vayan a mayores».

En cualquier caso, desde el Lluís Vives exigieron a Sánchez de León «que se aclaren los hechos producidos a raíz de los ocurridos el miércoles pasado día 15» y que según la directora del centro fue algo «desproporcionado». En este sentido, quiso recordar que el «detonante» de todo fue cuando apenas «una treintena de alumnos (del centro) se sentaron en la calle manifestándose y concentrándose por unos motivos concretos que tienen que ver con educación».

«No eran muchos, jugaban un poco al gato y al ratón y a estirar un poco los semáforos» pero «a partir de ese momento hubo una actuación desmesurada de la policía con la detención de uno de nuestros alumnos y una cosa que nadie entendió porque no procedía, incluso tuvo que venir la Policía Local a pedir por favor moderación a la Policía Nacional», aseguró. «Como docentes, no entendemos qué es lo que puede llevar a una actuación de este tipo en un momento dado y a la contraria, como ayer que hubo una manifestación de unas 4.000 personas y sin embargo la calma fue absoluta».

De hecho, el Lluís Vives es «una comunidad pacífica» subrayó y aprovechó para puntualizar que «ni muchísimo menos es verdad eso que se dice de que se incita al alumnado a cambio de aprobados o que no vengan a clase, que no computan las faltas, es absolutamente falso y lo desmiento una vez más», quiso dejar claro. Así, Valiente por su parte, se comprometió con la delegada del Gobierno «a transmitir mensajes de paz, tranquilidad y siempre basados en los valores democráticos, como no puede ser de otra manera, pero así lo hemos hecho siempre».

«Lo que denunciamos» es que «solo hay una parte que analizar e investigar que fue una actuación desproporcionada y desmesurada» del pasado miércoles día 15, «de una parte bastante más fuerte, bastante más fuerte del 'enemigo' que se ha visto», dijo. De hecho, después de lo sucedido en los últimos días, «es muy difícil para nosotros como docentes tratar de transmitir a los alumnos que las fuerzas del orden son fuerzas del orden cuando para ellos son fuerzas del desorden y hay que sacarlos como ocurrió ayer por una puertecita de atrás, escapando un poco de todo el despliegue policial que había».