Decenas de miles de personas llenaron ayer las calles del centro de Valencia para manifestarse en contra de los recortes en los servicios públicos representado en el decreto-Ley aprobado en enero por el Consell, para reducir el gasto en el sector público en más de 1.000 millones de euros.

Se trataba del colofón a las movilizaciones que han impulsado durante este mes los cinco sindicatos mayoritarios de la Comunitat Valenciana con el objetivo de exigir la retirada del citado documento y para pedir "depuración de responsabilidades en el Consell". Así, UGT, CC OO, CSI·F, FSES e Intersindical Valenciana impulsaron en las tres capitales de provincia manifestaciones multitudinarias que según las propias organizaciones sindicales llegaron a reunir a 250.000 participantes en Valencia, 75.000 en Alicante y más de 30.000 en Castelló. Fuentes de la Policía Local redujeron los asistentes en Valencia a 25.000 y 8.000 en Castelló.

A las 18 horas la marcha empezó a andar desde San Agustín y si bien lo hizo a buen ritmo la gran cantidad de gente que había en la comitiva hizo que la cola todavía siguiera quieta casi una hora después. La larga manifestación llegó a ocupar al mismo tiempo toda la calle Xàtiva, Colón y Navarro Reverter. Asimismo, al llegar la cabecera al punto de llegada en la Alameda con Puente del Real, los organizadores pedían a la gente que se acercaran al escenario y ocuparan toda la avenida porque seguraban que todavía había gente frente a la plaza de toros.

El público era muy diverso. Desde quinceañeros vestidos de chándal, hasta "alternativos", jubilados, a familias enteras con el carrito del bebé. Participaron alumnos, profesores, médicos, y diversas agrupaciones sociales como la Plataforma por la Defesa de la Ley de Dependencia.

Gritos contra Sánchez de León

En las pancartas se podían leer críticas como "Sobran chorizos", "senyor pirotècnic, pot començar la retallà" y otras que pedían una "huelga indefinida ya". Del mismo modo, en diversos momentos de la manifestación, los participantes exigieron a gritos la dimisión de la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Paula Sánchez de León, por las cargas policiales contra estudiantes de los últimos días. También destacó una unidad improvisada de los trabajadores de RTVV sobre un pequeño camión con el que querían dar "voz a todos los sectores de la sociedad" mediante entrevistas que se escuchaban por unos altavoces. Fue precisamente una periodista de Canal 9, Xelo Miralles quien leyó el manifiesto al final del acto reivindicativo.

En el parlamento los convocantes criticaron el decreto-Ley del Consell y señalaron que "no se busca racionalizar, sino hacer caja a costa de meter mano en los sueldos de los trabajadores" y recortando en los servicios públicos. Además incidieron en criticar la política económica del Consell basada en "los grandes eventos, la especulación con el territorio y la privatización de los servicios públicos". Animaron también a llevar una "respuesta dura y contundente" para propiciar la retirada del decreto de recortes.

Por último hicieron un apoyo público a los estudiantes del Instituto Lluís Vives y censuraron la "represión policial". La marcha acabó con una actuación del Grupo de Danza del Conservatorio de Valencia y la presencia del humorista Xavi Castillo.