Además de destacar por la continuidad de Blasco, la nueva dirección retrata la alianza entre el presidente de la diputación y Rita Barberá. Vicente Betoret, como secretario general, y Juan José Medina (organización) siguen como hombres fuerte de una "macroejecutiva" con 62 nombres, sin contar vocales y presidentes comarcales. Ha habido guiños a todos los sectores, menos al secretario general, Serafín Castellano, que tampoco pidió asientos para sus colaboradores.

Se crean dos plazas de coordinador, una para Belén Hoyo (diputada afín a Rus) y otra para Cristóbal Grau, concejal de Rita Barberá. Continúan destacados rusistas como Emilio Llopis y diputados provinciales como Miguel Bailach o Maria Carmen Contelles.

Los colaboradores de Rita Barberá también copan puestos relevancia, como los concejales Alfonso Grau, María Jesús Puchalt o Alfonso Novo. El sector cristiano que encabeza Juan Cotino también está ampliamente representado, con nombres como Miquel Domínguez, Enrique Ortí, Chelo Escribá, Pepe Pons o David Calatayud, en puestos de secretario de área.

Rus también ha tenido un detalle con la delegada Sánchez de León, al incorporar al subdelegado Luis Santamaría; y hasta antiguos zaplanistas como Paco Micó. También ha promocionado a jóvenes, como el portavoz en l'Eliana, Sergio Montaner, o el militante de Abastos (Valencia), José Morgan.