La suerte que ayer recorrió de norte a sur la Comunitat Valenciana no pasó de largo por la Ribera. El sorteo extraordinario de la lotería de Navidad fue generoso con la comarca al dejar una lluvia de 4,7 millones de euros gracias al tercer y un quinto premio repartidos en Carcaixent, Algemesí y Sueca, respectivamente.

El número 30872, agraciado con un quinto premio y vendido en la administración número 3 de la calle Albalat de Algemesí, fue el que más dinero dejó en toda la comarca con un total de 3,2 millones de euros. El propietario del establecimiento lotero algemesinense, Jesús Jiménez, confirmó a Levante-EMV que había vendido 54 series del número premiado, todas ellas repartidas en décimos.

Según creía Jiménez, la mayoría de las papeletas fueron adquiridas por vecinos de la localidad, aunque algunas series habían ido a parar a una fábrica de embutidos de Barcelona y a una zona del norte de España que no supo especificar. «No se ha devuelto ni un solo número», decía exultante a la vez que nervioso. Eso sí, sin soltar una copa de cava con la que brindó por la suerte.

Sin embargo, pese a la importancia del premio y lo repartido que ha estado, la oficina no registró una gran afluencia de agraciados. Una de las pocas ganadoras que se dejó caer por allí fue María Dolores Rodríguez, pensionista y vecina de Algemesí que llevaba un décimo. Clienta habitual del establecimiento lotero, acudió acompañada de su familia. Emocionada, reconocía que su marido está en paro y los 6.000 euros del premio les supondrán «una ayuda» en estos tiempos de dificultades.

La 3 de Algemesí cumplirá dos años abierta al público el próximo mes de marzo. En su corta trayectoria ya ha repartido algunos premios importantes, aunque el dado ayer es, por ahora, el más destacable de todos ellos.

50.000 euros al décimo

La administración número 3 de Carcaixent repartió este sábado el mayor de los premios de su dilatada historia de 30 años, el tercero del sorteo de Navidad. Fue gracias al número 64.084.

En total, la oficina carcagentina vendió una serie entera, concretamente la 91, que dejó 500.000 euros en la localidad, con 50.000 euros al décimo.

«Se ha quedado todo en el pueblo y ha sido vendido íntegramente en ventanilla», afirmaron las propietarias del establecimiento, las hermanas Clementina y Begoña Ferrándiz. Ambas no daban crédito. Se hicieron cargo de la administración el pasado 15 de octubre y no han tenido que esperar durante mucho tiempo la visita de la diosa fortuna.

Los que no acudieron al local fueron los ganadores, ya que ninguno se dejó ver por el despacho de la calle Cándido Hernández.