¿La experiencia en RTVV está siendo lo que esperaba?
Antes de llegar yo no consumía Canal 9, porque estaba en Madrid y cuando venía aquí lo sintonizaba en alguna ocasión pero no era una cadena de referencia. La realidad de esta casa es mucho más compleja de lo que imaginaba, aunque quería venir con la cabeza vacía de prejuicios, porque sabía que era otra etapa, otra televisión y otros objetivos.
¿Por qué cree que la eligieron a usted y no a alguien de la casa?
Por mucho que se criticara el nombramiento por no ser de la casa, creo que era terapéutico. Se necesitaba alguien de fuera, sin hipotecas y sin que ningún amigo se haya marchado por el ERE. Vienes mucho más libre para ponerlo todo patas arriba, que era necesario. Cuestionarlo todo ha sido la filosofía que Rosa Vidal ha puesto en el comité de dirección.
¿Su misión es romper con el pasado de los informativos?
Mi misión es hacer periodismo. No voy a hablar del pasado porque no tengo nada que ver con él. Es un asunto cerrado, por mucho que se quiera? Mi misión es ayudar a despertar a los profesionales, que no tengan miedo a hacer periodismo.
¿Si hay que hacer periodismo es porque antes se hacía propaganda?
Vuelvo a decir que no voy a juzgar lo que se hacía.
¿Ni asume ese legado?
Yo no. En absoluto. Me lo manda la ley: el contrato programa establece la independencia de RTVV SAU de todos los intentos de influencia. Me creo que esta empresa es independiente.
¿Los informativos de Nou son libres y plurales hoy?
Se opina mucho de los informativos de Nou sin verlos. Creo que hay una percepción de que son más plurales y creo que las corrientes de aire se remontan a un poquito más atrás de nuestra llegada, pero realmente ahora son corrientes. A Nou no se le han dado ni cien días de gracia. Y los pido, porque se ha hecho un recorrido de sangre, sudor y lágrimas en estos seis meses.
¿Que se sustancia en qué?
No sé cuántas empresas públicas han cambiado un organigrama, han sacado un contrato programa, han hecho un reequilibrio patrimonial, han modificado el horario de la gente, que llevaba diez años sin tocarse, han licitado 12 millones de euros para 18 nuevos programas, han fusionado dos cadenas, han cambiado la marca, hemos adelantado el horario de la segunda edición del Notícies 9 a las 20.30. ¿Qué más se puede hacer para que la gente confíe en que esto es una empresa nueva? ¿Por qué no nos dejáis?
¿Van a hacer algún acto televisivo de desagravio con las víctimas del accidente del metro?
Estoy harta de este tema. Puedo pasarle cuántas veces ha salido el asunto del metro desde abril. El último balance lo tengo de agosto y ha salido 16 o 17 veces sin contar las rondas del Nou24. Se ha oído por primera vez aquí la voz de Beatriz Garrote [la presidenta de la asociación de víctimas]. El desagravio que lo haga el comité de empresa, que tiene las santas narices de recibir un premio y pedir perdón seis años después. ¡Que lo hubiera pedido antes! Hay actitudes que me parecen muy cínicas. De lo que saliera antes yo no soy responsable. ¿Hay más acto de desagravio que mirar hacia las víctimas y sacarles?
¿Cree que han roto el apagón informativo en el tratamiento del caso Gürtel y que este es apropiado periodísticamente?
No he venido a apagar ni a encender, solo a contar lo que pasa. Cuando hay una noticia importante sobre temas delicados para los partidos afectados, la contamos. Después puede ser discutible si hemos dado mucho o poco, pero eso yo lo podría hacer también de Antena 3, TVE o La Sexta. Cuando La Sexta apostó por el metro no sacaba los totales de Císcar [portavoz del Consell] diciendo que los documentos se ponían a disposición de la Fiscalía. Solo querían reabrir el caso?
Socialmente lo reabrió. ¿No es un desdoro que eso lo consiguiera Jordi Èvole y no RTVV?
Lo triste y penoso es que tuvo que ser una televisión la que pinchara a los políticos para sacar iniciativas y les pusiera las pilas.
¿Y gastarse 170.000 euros (más IVA) en remodelar el plató de informativos no es un exceso cuando se acaba de despedir a mil personas?
No, porque esta televisión tenía que renacer. No se había hecho nada desde 1989 y no podíamos salir con el mismo plató porque el público no se cree que hay un proyecto diferente si no cambias el traje. También contribuye a despertar la autoestima de los que se quedan en RTVV. ¿Que seamos más austeros? Si por primera vez se ha encargado el logotipo y la sintonía a gente de la casa y una parte de los decorados los ha hecho Mantenimiento.
¿Tiene claro por qué la audiencia ha caído hasta cuotas del 3 % en los últimos años?
¡Una televisión que no tiene programas!
La bajada empezó bastante antes de la no contratación de programas.
Ya, pero yo no formo parte de la bajada. Existe un sentimiento evidente de desapego y nadie duda de que esta tele ha pasado por etapas en que la gente se ha ido desapuntando. Seguramente la gente que se ha ido de RTVV tenía motivos y eso es lo que queremos revertir. Cuando tengamos programas y nos miréis sin prejuicios podremos juzgar la audiencia. Espere que empecemos con l'Alqueria, los concursos, los magacines?
¿Está aprendiendo valenciano?
No, pero digo alguna cosa: Pardal que vola a la cassola, Anem a vore? [Ríe] Amo Valencia, vivo aquí con intervalos desde hace 22 años, cuando un valenciano me robó el corazón y lo dejé todo. Entiendo el valenciano y lo leo, pero hablarlo? no tengo más tiempo.
