El conseller de Hacienda, Juan Carlos Moragues, explicó ayer que cuando el Gobierno valenciano decidió la compra de Valmor para hacerse cargo de la organización de la Fórmula 1 estaba «en un escenario muy complicado en el que había dos alternativas, una era mala y la otra peor». Se trataba de elegir entre «susto o muerte», señaló. Moragues se pronunció de esta manera al ser preguntado por el informe en el que se basó el Consell para decirse a comprar Valmor por 1 euro y asumir una deuda superior a los 34 millones.Argumentó que se optó por la decisión que «menor perjuicio y quebranto produjera a las arcas públicas autonómicas» y de este modo «se intentó evitar el impacto económico por la no celebración de ese gran premio y la indemnización» a la que se tendría que haber hecho frente. «Se optó como siempre por la decisión más prudente, cautelosa y mejor para los intereses de la Comunitat Valenciana», señaló el conseller. El informe, dijo, pone en evidencia los perjuicios que hubiera provocado la no celebración de la Fórmula 1. efe valencia