«Salud mental pública y de calidad» fue uno de los lemas que más repitieron ayer los cerca de 500 manifestantes que recorrieron las calles del centro de Valencia por la «angustiosa situación» de las personas con enfermedad mental en la Comunitat Valenciana.

Como cada seis meses, «la marea verde» se concentró en la plaza de la Virgen de Valencia para exigir recursos de rehabilitación públicos y de calidad; la desaparición del copago y de las concesiones; diagnósticos precoces, centros específicos, viviendas tuteladas y oportunidades laborales. También, que la Conselleria de Sanidad asuma competencias, además del cumplimiento de la Ley General de Sanidad y de la adaptación de la Ley de Dependencia a sus necesidades.

Desde la Plataforma en defensa de los servicios públicos de salud mental de Valencia apuntaban que las enfermedades mentales son las «olvidadas» del sistema sanitario. Otra crítica fue la creciente institucionalización y segregación de estas personas, lo que las «estigmatiza y vulnera sus derechos fundamentales», añadieron.

Javier Belda, psiquiatra miembro de la junta de la Asociación Española de Neuropsiquiatría-PV, explicó que en los últimos 5 años el presupuesto que la Generalitat Valenciana destina a Sanidad descendió el 6 % y, en concreto, el de salud mental un 8 %.

Además, dispositivos que favorecen la integración, como las viviendas tuteladas, se han reducido un 35 %; y de 2002 a 2014 ningún profesional se ha incorporado a la atención comunitaria en salud mental, según los datos del observatorio de la plataforma. Asimismo, el número de psiquiatras por cada 100.000 habitantes es de 3,8 „lejos de los siete que marcaba el Plan de Salud Mental valenciano que se redactó hace 10 años, y de los 10 que dicta la Organización Mundial de la Salud„.

«No hay ni un plan, ni un objetivo, ni un compromiso vigente» sobre salud mental, explicó Belda, y señaló que esperaban «algún paso» del nuevo Consell, «pero aún no se ha producido, todo ha quedado en buenas palabras».

También se pidieron más medios en las comarcas, y estuvieron presentes asociaciones de toda la provincia, como Öbertament de Gandia, Amadem de la Marina Alta, o AFEM de Torrent, además de Psicólogos sin fronteras, y Asprona Timbals.