Con la lupa del Ministerio de Hacienda puesta sobre el gasto que acarreará la reapertura de la nueva RTVV en una Administración sujeta a importantes limitaciones presupuestarias, el grupo parlamentario Podemos no se da por satisfecho con los 55 millones de euros que el Consell ha presupuestado para el arranque de la nueva corporación de medios.

La formación morada considera insuficiente ese dinero y estudia presentar enmiendas, aunque cree que cuando la comisión liquidadora acabe los trabajos en la antigua sociedad pueda existir un remanente que amplíe el presupuesto destinado a la puesta en marcha de la corporación durante el segundo semestre del año.

En palabras del síndic, Antonio Montiel, la asignación es «pobre» ya que se sitúa en la parte baja de la horquilla que la ley permite para asignar el presupuesto de la nueva televisión, que nunca podrá ser inferior al 0,3 % del presupuesto ni superar el 0,6. Como las cuentas consolidadas de 2017 ascienden a 18.370 millones, el presupuesto mínimo de RTVV serían los 55 que figuran en las cuentas, mientras el máximo llegaría a 110.

Sin embargo, el dinero asignado a la nueva radiotelevisión también genera fricciones entre los socios de gobierno. A Compromís le parece que los 55 millones para el arranque son más que suficientes. «Para comenzar está bastante bien», defiende el portavoz de Compromís, Fran Ferri, que cree que una vez se elija al director general y se establezca el contrato programa la cantidad asignada podría aumentar en los próximos presupuestos. «No sé Montiel en qué se basa, igual él ya tiene el proyecto en la cabeza», lanzó ayer el síndic de Compromís.

El PSPV quiere retirar a Fernández

Mientras, la presencia de una de las representantes del PP en el nuevo consejo rector sigue en el aire. El pleno de las Corts prevé celebrar la próxima semana la segunda votación después de que el plante de los diputados populares en la primera impidiera que la periodista Maite Fernández tomara posesión como consejera junto al resto de miembros del consejo.

Pero el PP anunció ayer que tampoco participará en la segunda votación, por lo que el portavoz del PSPV, Manolo Mata, cree que lo mejor es retirar la propuesta que socialistas, Compromís y Ciudadanos sí estaban dispuestos a apoyar para no dañar más a una candidata que no apoya ni el partido que la propuso. El PP insiste en que no se mueve de su posición inicial, que es la opción de Fernández, pero Mata acusa a los populares de practicar una especie de kale borroka parlamentaria y les reclama la vuelta al constitucionalismo parlamentario. La situación creada con la representante del PP no afecta al funcionamiento del consejo rector, que puede seguir los trabajos para reabrir el ente.