n La imagen del día no se inmortalizó: el jefe del Consell y líder del PSPV, Ximo Puig, recibiendo en en Palau de la Generalitat al nuevo hombre fuerte del PSOE, el portavoz en el Congreso de los Diputados José Luis Ábalos, también secretario general en la provincia de València y referente del sector que, a diferencia de Puig y la cúpula del partido, se decantó en las recientes primarias por Pedro Sánchez y acertó ganador.

Puig y Ábalos tampoco se dejaron ver juntos por la tarde, durante el comité nacional del partido, al que la mano derecha del político recuperado para el trono de Ferraz no asistió.

El gesto de Puig, no obstante, que se reunió también en el Palau con otro partidario de Sánchez, el diputado provincial Bartolomé Nofuentes, portavoz del grupo de concejales Socialistes 3.0, no desactivó la carga crítica del comité.

Tampoco las palabras de Puig de reconocimiento al vencedor al inicio de su intervención. «Todo nuestro apoyo y lealtad a Pedro Sanchez, porque de su éxito dependerá que podamos cambiar la vida de las personas», dijo entre el aplauso de la concurrencia.

Fue justo antes de felicitar también al «compañero» Ábalos como nuevo portavoz y ante la tarea que tiene por delante en el congreso federal, donde «representará bien a todos».

Estuvo en la línea de lo que le había expresado cara a cara horas antes en el Palau, según fuentes consultadas: que Sánchez cuenta como secretario general con su apoyo y que él (Puig) va a optar a continuar liderando el PSPV con un proyecto de integración e innovación. Eso le dijo.

Ábalos no le habló de candidaturas alternativas, pero sí lamentó no haber pisado antes el Palau y no ser tenido en cuenta, apuntaron en su entorno. La respuesta del otro lado es que la incomunicación ha sido de doble dirección, que tampoco el líder provincial ha levantado el teléfono.

Era un preámbulo de lo que se iba a ver horas después en Blanqueries. Puig no mencionó inicialmente la crisis abierta en octubre ni las primarias vividas entre Sánchez y Susana Díaz (su favorita). Prefirió un discurso en positivo, subrayar lo logrado desde que accedió a la secretaría general en 2012, recordar las medidas estrella del gobierno compartido con Compromís y ofrecer más apertura del partido, en forma de primarias abiertas a los simpatizantes para elegir a los candidatos de todos los municipios.

Tuvo que referirse a la fractura más tarde, después de oír algunas intervenciones críticas. Porque lo que se vio por la tarde en la sede socialista de Blanqueries es que la herida que sangra desde el otoño pasado, con el derrocamiento de Sánchez, continúa sin cerrar. Ni siquiera después de las primarias.

El pretexto fundamental de la discordia fue la fecha del congreso de país, previsto para el último fin de semana de julio en Elx. Demasiado pronto para algunos. El exalcalde de la ciudad Alejandro Soler y cabeza del sanchismo en Alicante dijo que era un error grave, una estrategia para «amarrar la dirección para que no haya alternativa». En una línea similar se expresó Voro Soler (Godella).

Tuvieron la respuesta del síndic en las Corts, Manolo Mata, que llamó a acabar la guerra y apoyar a Puig. Y argumentó que el congreso no podría retrasarse a septiembre, cuando coincidiría con el Debate de Politíca General.

El propio secretario general alegó al final que la fecha la había anunciado antes de las primarias. Puig pidió perdón incluso a los militantes por la parte que le toca, según asistentes (la parte del debate fue a puerta cerrada), en referencia a su apoyo a Díaz, «pero en los últimos años todos hemos hecho cosas mal», matizó.

Lo dijo después de una intervención especialmente dura de una militante de València Nord (la agrupación de Ábalos): Isabel Gimeno pidió que lo institucional no se anteponga a lo orgánico, que si es así que Puig solo sea president, en referencia a la posible bicefalia con la que los sanchistas especulan estos días.

Josep Maria Ángel, Herick Campos, Vicent Sarrià (que pidió un aplauso para el líder) o Francesc Colomer respaldaron la gestión de Puig y pidieron «dejar de contar cuántos son unos y otros», si bien el secretario provincial de Castelló también criticó la idea de vincular el gobierno a las primarias.

Todo acabó con una paradoja muy de la casa: se votó la fecha del congreso y la propuesta de la dirección no obtuvo ningún voto en contra ni ninguna abstención. Fin de la discusión colectiva. Un marciano tampoco lo entendería.

El jefe del Consell es el segundo líder local al que Juncker recibe

El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, tienen previsto reunirse el próximo martes, día 13, en Estrasburgo. El jefe del Consell es el segundo mandatario autonómico español que se reúne con el dirigente europeo, ya que hasta el momento Juncker ha mantenido un encuentro con el lehendakari vasco, Íñigo Urkullu.

Fuentes del Ejecutivo comunitario citadas por la agencia Europa Press confirmaron la reunión para el próximo martes, en la que abordarán el plan Juncker. Así, la delicada situación financiera de la Comunitat Valenciana, con una deuda que supera los 45.000 millones de euros, y asistida por los préstamos de liquidez del Gobierno, va a estar presente en la reunión. El presidente del ejecutivo europeo lanzó un plan de inversión que lleva su nombre y que tiene como objetivo movilizar 315.000 millones de euros en inversiones adicionales hasta 2018 para atender necesidades de la economía real.

La reunión se produce a petición del presidente valenciano, que solicitó el encuentro con Juncker. En este sentido, el presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, también pidió el pasado año una entrevista con el presidente comunitario, pero le fue denegada alegando motivos de agenda. Tampoco la presidenta andaluza, Susana Díaz, fue recibida por Juncker cuando visitó la capital europea. En cambio, Puig sí ha logrado cita con el mandatario europeo.

Además, el presidente valenciano tiene previsto visitar durante su viaje la sede del Banco Europeo de Inversiones (BEI), entidad que es propiedad de todos los Estados miembros de la UE y que ha creado un Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas. levante-emv valència