El presidente de la Generalitat y secretario general de los socialistas valencianos, Ximo Puig, ha asegurado esta mañana a su llegada a la clausura del congreso federal que el PSOE celebra hoy en Madrid que no encuentra justificación a la decisión del sector sanchista del PSPV de presentarle batalla en las primarias valencianas. Alguien tendrá que explicar esta decisión, ha dicho Puig, que entiende que es un ataque también a la figura del presidente.

Puig ha hablado esta misma mañana por teléfono con el secretario general de los socialistas españoles, Pedro Sánchez, y defiende que siempre ha practicado la inclusión con sus oponentes internos por lo que no encuentra explicación a la decisión de la ejecutiva federal, con el valenciano José Luis Ábalos como nuevo hombre fuerte, de presentarle una candidatura que liderará el alcalde de Burjassot Rafael García, que la presenta esta misma tarde en Blanqueries, un acto que esta mañana ha acabado de cerrarse.

Los críticos a Puig entienden que el PSPV ha quedado completamente desdibujado y que el presidente debe dedicar todo su tiempo a las cuestiones institucionales y de gobierno, mientras otros reaniman el partido. Pero en el entorno del presidente consideran abiertamente una irresponsabilidad y hablan de venganza de Sánchez contra Puig por apoyar su defenestración el pasado octubre.

Puig cree que el desafío interno da armas al rival político, en este caso el PP. Defiende su gestión, pone en valor que los socialistas gobiernen tras 20 años de poder popular y admite que el PSPV necesita una modernización que él está dispuesto a liderar. Remarca que él siempre ha apostado por la integración y recuerda que José Luis Ábalos es secretario general provincial en Valencia porque se decidió no presentar la candidatura de Toni Such como llegó a plantearse ante el congreso provincial.