La Guardia Civil desarticuló la semana pasada una banda organizada especializada en robos con violencia y con fuerza tras realizar una decena de registros en varios municipios de la comarca del Camp de Túria que se saldó con catorce detenidos.

Los ladrones, un grupo de españoles y otro de origen rumano, utilizaban dispositivos de posicionamiento GPS para tener controladas a sus víctimas en todo momento, según ha podido saber Levante-EMV, y pretendía secuestrar a un empresario valenciano. De hecho, los sospechosos habían colocado una baliza de seguimiento, sujeta con bridas, en la parte interior de una de las ruedas del vehículo de su víctima para saber dónde se encontraba en cada momento y ya tenían listo el lugar donde lo iban a ocultar para pedir un rescate a su familia.

Tras meses de investigaciones, el Juzgado de Instrucción número cinco de Llíria autorizó el pasado martes la entrada y registro simultáneo en varios inmuebles de Llíria, l´Eliana, la Pobla de Vallbona y Polinyà de Xúquer, así como en una vivienda de Navarra.

Once de los 12 arrestados en tierras valencinas -ocho hombres y cuatro mujeres- fueron puestos a disposición judicial el pasado viernes. A las puertas de los juzgados de Llíria, familiares de los detenidos esperaban la decisión del juez de instrucción número dos, en funciones de guardia.

Las detenciones, realizadas el pasado martes, se precipitaron precisamente a raíz de del intento de secuestro frustrado de este empresario, a quien pretendía extorsionar la organización criminal.

Además de los domicilios de los sospechosos, donde los agentes se incautaron de material robado y balizas GPS, la Guardia Civil registró una joyería de Llíria donde supuestamente dicha organización criminal se deshacía de las joyas sustraídas en los robos.

En los citados registros domiciliarios los agentes han intervenido uno de estos dispositivos de seguimiento, dos pistolas detonadoras, una carabina, una estrella Ninja y 12.000 euros en efectivo, así como joyas y piedras preciosas, teléfonos móviles, tablets, ordenadores y otros efectos. También se han incautado de cuatro coches y una furgoneta y se han bloqueado 28 cuentas bancarias.

Según informaron fuentes jurídicas, siete de los detenidos ingresaron en prisión provisional. A los tres españoles se les imputan los delitos de robos con fuerza en domicilios, detención ilegal y pertenencia a banda criminal. A los otros cuatro, de origen rumano y entre los que se encuentra el presunto cabecilla, se les atribuyen varios robos con violencia, organización criminal, delitos contra la salud pública y posible blanqueo de capitales.

Los detalles de dicha operación, de la que ha informado en exclusiva Levante-EMV, se han dado a conocer hoy en una rueda de prensa que ha contado con la presencia del coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Valencia, Amador Sánchez Escalada; el subdelegado del Gobierno en Valencia, José Roberto González Cachorro y el teniente de Policía Judicial José Palacios, quien ha coordinado las investigaciones.

La llamada "Operación Wagen" se ha saldado finalmente con la detención de catorce personas, nueve hombres y cuatro mujeres, de edades comprendidas entre los 20 y los 47 años. En las investigaciones, que se iniciaron hace meses, han participado el Grupo de Patrimonio de la Comandancia de València, el Equipo de Policía Judicial de Riba-roja y el Área de Investigación de la Pobla de Vallbona. Asimismo, durante los registros se contó con el apoyo de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia (Usecic).

Los investigadores pudieron averiguar el lugar al que iba a ser llevada la víctima y el vehículo en el que iban a transportarla, lo que precipitó la detenciones para "preservar la integridad física del empresario", como así indicó el teniente Palacios.

Un cerrajero profesional

Además de la violencia que ejercían con sus víctimas, a quienes no dudaban en agredir para obtener su botín, destaca el alto grado de especialización técnica de dicho grupo criminal. De hecho, contaban "con un cerrajero profesional para minimizar el tiempo de acceso a las viviendas" y para abrir las cajas fuertes sin dificultad.