La caída de un muro sobre la vía pública, supuestamente como consecuencia de la acumulación de agua, encendió ayer las alarmas en Montserrat. La brigada municipal de obras y los voluntarios de Protección Civil, junto a la Policía Local, procedieron a retirar los escombros para descartar que pudiera haber alguna persona sepultada y asegurar el perímetro.

El incidente se produjo en la calle Valencia sobre las 16 horas. Fuentes de Protección Civil detallaron que se trata de un muro perimetral que se había conservado en los trabajos de derribo de una antigua vivienda y que ayer se desplomó sobre la acera destrozando un contenedor de basura, al parecer como consecuencia de una acumulación de agua en el interior.

Las mismas fuentes indicaron que se había realizado un rápido desescombro para confirmar que no había ninguna víctima. El inmueble se encuentra en las inmediaciones del centro de salud.

Más allá del caso de Montserrat, las lluvias dejaron en la Ribera varios viales cortados y un buen sabor de boca para los agricultores. Favara registró el pico de lluvia más elevado de la comarca, con 111 l/m2. La localidad se encuentra, precisamente, en los límites con la Safor, el territorio más afectado por las precipitaciones y llegó, incluso, a contabilizar casi 60 litros en una hora, debido a una fuerte tromba de agua que, afortunadamente, no dejó grandes daños. La segunda cifra más elevada se dio en Carcaixent, con 89,9 l/m2. Le siguió el valle de la Murta, en Alzira, con 87,6.

La presencia de agua en la carretera obligó a cortar algunos viales. Es el caso de la CV-505, que une Alzira con Sueca. La también conocida como carretera de Albalat se cerró al tráfico rodado entre los puntos kilométricos 1 y 3, aproximadamente a la altura del Barranc de la Murta.

Con todo, se reabrió a lo largo de la tarde, cuando la lluvia, pese a ser persistente, fue menos intensa. En la capital ribereña también se cortaron el Camí de Pescadors y el de Sant Bernabé. Ocurrió lo mismo con la CV-506 (Forn de Carrascosa) y el camino de Vilella.Suerte desigual para el campo

Tras una primera jornada de lluvias, los grandes beneficiados son los agricultores. «De momento no se pueden valorar posibles daños, así que el primer balance es positivo. El agua ha caído con contundencia pero a intervalos, así que el campo la ha podido ir drenando poco a poco», aseguró el vicepresidente segundo de AVA, Bernardo Ferrer.

«Es cierto que puede perjudicar a algnas variedades tempranas de cítricos, que se están acabando de recolectar, así que están ya en el momento máximo de maduración», concedió Ferrer, que añadió: «Pero, en líneas generales y a falta de ver cómo evoluciona el tiempo en los próximos días, esta lluvia es muy beneficiosa. Las variedades de la segunda parte de la campaña de la naranja alcanzarán mayores calibres. Además, muchos agricultores han realizado tratamientos para evitar los problemas fúngicos y del agua».