El presidente de la Autoridad Portuaria de València (APV), Aurelio Martínez, aplaudió ayer la decisión del Parlamento Europeo de incluir como ejes prioritarios los corredores que unen por ferrocarril València-Sagunt-Teruel-Zaragoza y València-Albacete-Madrid dentro del mecanismo «Conectar Europa» -con lo que podrán recibir fondos de Bruselas- si bien considera necesario que el ente público Adif (Ministerio de Fomento) realiza un reparto proporcional de las inversiones en la citada infraestructura.

El corredor cantábrico-mediterráneo, según los planes de Adif, contempla unas inversiones de 13.100 millones de euros; de los cuales, 12.7600 aproximadamente están previstos para diversos proyectos del tramo Zaragoza-Bilbao; y otros 400 millones para el tramo Zaragoza-Teruel-Sagunt-València. El problema es que estas previsiones implican una «descompensación de 33 a 1; por lo que la aprobación del Parlamento Europeo podría ser una oportunidad para rescatar alguno de los proyectos que se planificaron para el tramo Valencia-Zaragoza», advierte la entidad presidida por Aurelio Martínez.

Recuperar proyectos

Entre esos planes de futuro destacan la doble plataforma de vías y la supresión de los principales desniveles y pendientes; «obras todas ellas necesarias para la mejora de los tráficos de personas y de mercancías sin que en ningún caso estos nuevos planteamientos impliquen ralentización de los proyectos que ya se están ejecutando», puntualiza la APV.

También los miembros del comité ejecutivo de la patronal autonómica CEV han mostrado su satisfacción por la decisión adoptada por el Parlamento Europeo. Según la organización presidida por Salvador Navarro, el corredor cantábrico-mediterráneo unirá los corredores atlántico y mediterráneo y los hará más competitivos; conectará grandes áreas logísticas e industriales con los puertos del Mediterráneo y del Cantábrico, potenciará el uso del transporte ferroviario para el transporte de mercancías y cohesionará los territorios.