Viven con miedo. Y eso que ya han dejado de convivir con su maltratador. Y eso que ya forman parte del sistema de protección contra la violencia machista. Y eso que hablamos de mujeres que son objeto de vigilancia policial. En esta situación se encuentran en la actualidad 8.876 mujeres víctimas de violencia machista en la Comunitat Valenciana (4.335 en València, 906 en Castelló y 3.635 en Alicante). Estas casi 9.000 mujeres cuentan con medidas de protección policial que varían en función de su grado de «riesgo». En 4.035 víctimas no se aprecia riesgo alguno; 4.117 tiene un riesgo bajo y 694 tiene un riesgo medio. En el ojo del huracán hay 29 víctimas con riesgo alto. Solo una mujer en toda la Comunitat Valenciana cuenta con la designación de riesgo extremo.
Son datos del Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (Sistema VioGén), de octubre de este año, que persigue «establecer una tupida red que permita el seguimiento y protección de forma rápida, integral y efectiva de las mujeres maltratadas y de los menores que de ellas dependan, en cualquier parte del territorio nacional». Ahora bien, en el Informe Sombra Grevio (Grupo de Expertas en la lucha contra la violencia contra la mujer del consejo de Europa) las entidades feministas exigen una revisión del Sistema VioGén ya que «ahora en el 90% de los casos se estima nulo o bajo el riesgo a las víctimas y no incluye a los niños y niñas».
Así, para las medidas de riesgo «no apreciado» se establecen medidas de seguimiento (revisión del nivel de riesgo cada 3 meses) y, si es preciso, medidas de protección. Para las mujeres con nivel de riesgo «apreciado» (bajo, medio, alto y extremo) las medidas de protección van aumentando en intensidad según se incrementa el riesgo.
Las víctimas, sin embargo, aseguran sentirse «indefensas». «No hay un agente para cada caso, ni viven pegados a nosotras. La mayoría, que tenemos un riesgo bajo o nulo, llamamos a la policía si el agresor incumple la orden de alejamiento o nos vemos en peligro, pero siempre tienes la sensación de que si quiere matarte, te matará. Y si no lo hace es porque no quiere. Ya buscará cuándo y cómo hacerlo. O, al menos, eso es lo que dice mi exmarido. Afirma que ya lo hará, porque le va a costar 300 euros», explica una víctima de violencia machista con un grado bajo de riesgo.
Sin embargo, la presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, María Ángeles Carmona asegura que «hay que poner en marcha, aunque ya están a punto, las nuevas valoraciones policiales de riesgo que incluyen a los menores, así como las valoraciones forenses de peligrosidad del maltratador para los menores». Esto podría suponer un aumento del número de mujeres víctimas de violencia machista que cuentan con vigilancia o protección policial.
Ahora bien, el número de víctimas de violencia machista es mucho mayor que el número de mujeres maltratadas vigiladas por la policía. Así, con fecha de octubre de 2018 el sistema VioGén registra 69.436 víctimas de violencia machista y 76.761 casos (cada caso es una víctima con un agresor por lo que existen mujeres que tienen varios casos de violencia machista). De las 69.436 víctimas, hay 67.885 casos «inactivos». Eso significa que, por determinadas circunstancias, «se considera que, temporalmente, no es preciso que sea objeto de atención policial. El caso inactivo puede reactivarse en cualquier momento».
