La Entesa valenciana al Senado se aleja. La posibilidad de que los tres partidos que sostienen el Pacte del Botànic (PSPV, Compromís y Podemos) concurran juntos a la Cámara Alta es ya remota.
Conocido y asumido el rechazo del PSOE de Pedro Sánchez, los socialistas valencianos no moverán ficha. Si no lo hicieron en 2016 en tiempos de debilidad de Sánchez no lo harán ahora con su líder consolidado internamente y en la presidencia del Gobierno.
Puig asume la posición de Ferraz que adelantó este diario y cree que la Entesa con Podemos y Compromís trasladaría una imagen de «frente popular» de la que los socialistas quieren huir para no espantar al votante de centro.
En la decisión de poner distancia a la Entesa pesa verse en las encuestas por primera vez en lustros como el partido más votado en las próximas citas electorales. «El PSOE tiene un proyecto propio y lo quiere defender», dijo Puig.
Ser la fuerza más votada dispara exponencialmente el número de senadores ya que el reparto beneficia siempre al partido con más apoyos, lo que permite, por ejemplo, a los populares disponer en la actualidad del 70% de senadores con apenas el 30% de votos.
Así, los socialistas quieren evitar la arista que supondría una alianza con Podemos cuando buscan abarcar la mayor parte del electorado de centro tras el nuevo giro a la derecha de Ciudadanos con su cordón a Pedro Sánchez y su bipartito en Andalucía con el PP con apoyo de Vox.
El rechazo de Ferraz a la Entesa sirvió ayer el discurso en bandeja a Compromís. La coalición insiste en que la alianza aún es posible, pero pone el acento en que la decisión la han tomado en Madrid y no en València. Con ello erosionan a su socio, que es a la vez rival electoral y competencia directa en la batalla por proyectarse ante la ciudadanía como el partido que mejor defiende los intereses de los valencianos.
Compromís mantiene contactos abiertos con los socialistas, pero la decisión de Ferraz es ya definitiva.
Aún así, la lideresa de Compromís, Mónica Oltra, pidió ayer un esfuerzo para conformar una mayoría social que gane el Senado ante un sistema electoral trucado y la síndica adjunta en las Corts, Mónica Àlvaro, reclamó a los socialistas valencianos «empoderarse» frente a Madrid. «Lo que deseamos en Compromís es que el PSPV sea realmente el Partit Socialista del País Valencià y el que decida qué quieren ser de mayores», añadió Àlvaro. «Sería una lástima que por intereses que vienen de Madrid y que nada tienen que ver con la particularidad de nuestra tierra se dejara perder una oportunidad», remató la parlamentaria.
Además, el portavoz en Madrid, Joan Baldoví sostuvo que él sería partidario de ir al Senado con Podemos pero siempre que se sumen también los socialistas. «No los hemos decidido aún, pero no tendría sentido presentarse separados en las autonómicas y juntos en las generales», remarcó.
Con todo, en Compromís la idea de ir en alianza con Podemos al Senado si los socialistas se desmarcan no acaba de gustar. Dirigentes la descartan en privado. Señalan que su electorado podría entender que cada elección es distinta y que en la votación al Senado hay posibilidad con una Entesa valenciana de izquierdas de apartar al PP que usa su mayoría para el bloqueo, pero concurrir sin los socialistas no acaba de gustar. Ello aleja una alianza al estilo de A la Valenciana al Senado.
Preguntado por la Entesa, el síndic socialista, Manolo Mata, dijo ayer en las Corts que hay que hablar y reflexionar, aunque dejó claro que los socialistas valencianos se ven como primera fuerza en las próximas elecciones.
Podemos confía en un encuentro
Y mientras, Podemos espera. Su dirección autonómica convocó a un encuentro con el resto de la izquierda, pero no tienen respuesta oficial sobre la Entesa. Ayer en Podemos aseguraban que esa convocatoria se mantiene. «Es una oportunidad para encontrar otra configuración del Senado», dijo el diputado César Jiménez.
