El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) eligió en su sesión plenaria de ayer a la magistrada Esther Rojo Beltrán, como nueva presidenta de la Audiencia Provincial de València, según informaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV). Rojo Beltrán obtuvo el respaldo de 11 de los 21 miembros del Pleno del CGPJ, mientras que la magistrada María Dolores Hernández Rueda, quedó muy cerca con 10 votos.
Según informa el TSJCV, la nueva presidenta de la Audiencia Provincial de València ingresó en la carrera judicial en 1996 y sus primeros destinos judiciales fueron los juzgados de primera instancia e instrucción 2 de Dénia (donde llegó a ser decana) y 5 de Reus (Tarragona). En junio de 2005 se trasladó como magistrada al juzgado de lo penal 14 de València y en abril de 2013 pasó como refuerzo a las secciones penales de la Audiencia Provincial de València.
Desde junio de 2018, Pilar Esther Rojo Beltrán estaba destinada en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de València. De hecho es una de los tres magistrados que juzga el exconseller Rafael Blasco y 23 acusados más por el desvío de las ayudas de cooperación.
El programa de Esther Rojo Beltrán para presidir la Audiencia de València se sostiene en cuatro ejes, según explicó a los miembros del CGPJ en su exposición, adelantada por Levante-EMV: «innovación y modernización, transparencia, seguridad jurídica y relaciones internas institucionales. La nueva presidenta electa de la Audiencia Provincial de València añadía «como eje transversal los principios de ética judicial como una exigencia, un plus en un estándar mínimo exigible, además de la igualdad entre hombres y mujeres ».
La magistrada defendía la necesidad de la «unidad de criterio. Que un penado en Gandia o en Torrent no tenga una respuesta judicial diferente a uno de València. Cuando es dispar los efectos son devastadores porque perdemos la credibilidad del ciudadano en la justicia».
Entre sus propuestas, además de mantener los refuerzos para la Audiencia y exigir más plantilla, Rojo Beltrán también apostaba por «un servicio común de ejecución porque tenemos los funcionarios y sólo haría falta un juez más». Sobre las macrocausas judiciales, la magistrada defiende «la experiencia que ha adquirido la Audiencia Provincial lo que nos ha permitido detectar dónde se producen las disfunciones: se necesita no sólo refuerzo de magistrados, sino de funcionarios, además de salas de vista y espacio para las causas».
Por otra parte, el pleno del CGPJ también renovó en el cargo de presidente de la Audiencia Provincial de Castelló al magistrado José Manuel Marco Cos, quien optaba a la reelección para el cargo para el que fue nombrado por primera vez en mayo de 2014, según informan fuentes del TSJCV. Marco Cos, único candidato, obtuvo el apoyo unánime de los 21 miembros del Pleno.
El presidente de la Audiencia Provincial de Castelló ingresó en la carrera judicial en 1986, siendo su primer destino judicial el juzgado de primera instancia e instrucción de Vinarós. Antes de ingresar en la carrera judicial, Marco ejerció como abogado en Barcelona y fue técnico letrado de la Generalitat de Catalunya y jefe de de sección de Régimen Sancionador de la Dirección General de Arquitectura y Vivienda.
