La cifra de incendios forestales que ha sufrido la Comunitat Valenciana durante este verano se ha reducido casi a la mitad con respecto al mismo periodo de 2018, 78 fuegos frente a los 143 del año pasado, y la cifra de hectáreas afectadas ha descendido un 87 %, de 2.795,34 el año pasado a 365,5 en 2019.

Según los datos de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, en los meses de julio y agosto de 2019 han ardido en la Comunitat un total de 365,5 hectáreas -347 en Alicante, 1,50 en Castelló y 17 en Valencia-.

El incendio que mayor cantidad de territorio ha afectado fue el que se declaró en Beneixama (Alicante) el pasado 15 de julio, en el que ardieron 347 hectáreas, cuyas causas todavía se están investigando. En este mismo periodo apenas ha habido otros incendios significativos en Castelló y Valencia, y la mayoría no se ha extendido más allá de una hectárea.

Durante el verano de 2018 se produjeron 43 incendios forestales en Alicante, 31 en Castellón y 69 en Valencia, el más grave de ellos el 6 de agosto en Llutxent, un fuego provocado por un rayo que arrasó más de 2.727 hectáreas. El siguiente incendio atendiendo al total de hectáreas afectadas fue el que se registró el 28 de agosto del año pasado, un fuego intencionado que calcinó 20,2 hectáreas en Benirredrá (Alicante).