La concentración a favor de los presos del «procés» catalán terminó anoche con enfrentamientos entre la Policía Nacional y los manifesantes y dejó escenas de gran tensión en pleno centro de València. Dos activistas fueron detenidos por atentado a la autoridad durante las cargas policiales que se registraron cuando, tras dos horas de protesta en la plaza de los Pinazo y la calle Colón, los partidarios del independentismo siguieron la marcha por las calles Colón, Xàtiva y Sant Agustí. Los agentes quisieron restablecer la circulación y entonces se produjeron los primeros incidentes: hubo empujones, insultos y ataques al mobiliario público. Los dos detenidos han quedado este sábado en libertad.

Uno de los arrestados fue trasladado a las urgencias del centro de salud Font de Sant Lluís para ser atendido, mientras que dos agentes de la Policía Nacional también fueron asistidos por contusiones en el hospital. Hubo más agresiones durante los incidentes, aunque ninguno de los heridos revestía gravedad. La convocatoria de «Solidariès contra la repressió» congregó a cerca de 700 manifestantes. La Policía Nacional desplegó un amplio dispositivo para evitar altercados porque, a la misma hora, España 2000 promovió una contramanifestación en el mismo lugar sin autorización, hecho por el cual la Delegación de Gobierno anunció una sanción.

La llamada atrajo a menos de un centenar de ultraderechistas, que portaban banderas falangistas y preconstitucionales y quedaron atrincherados en las puertas de El Corte Inglés, flanqueados por una veintena de policías y separados a 50 metros de los independentistas. Ambos bandos intercambiaron insultos y cánticos entre las 18.30 horas y las 20 horas. Los choques violentos se registraron al disolverse las concentraciones.