La vía por la que se decanta ahora la Conselleria de Hacienda es la de elaborar un presupuesto autonómico antes de que acabe 2019, que después sería modificado vía decreto ley cuando el futuro Gobierno elabore, si puede, los suyos.

El conseller de Hacienda, Vicent Soler, aseguró ayer en Plaza Radio que están pensando en un «presupuesto puente» que se elaborará aún a riesgo de equivocarse en las cifras porque no se conoce ni las entregas a cuenta para 2020 ni el techo de gasto. Después se modificará en función de los nuevos ingresos que lleguen desde Madrid. Lo que está decidido es mantener los 1.325 millones reivindicativos hasta que se reforme el modelo de financiación por lo que de nuevo figurarán en las cuentas ya que eliminarlos alejaría al Consell de la media del gasto autonómico. Lo que está en debate es si los presupuestos pueden presentarse en las Corts después del 31 de octubre. Lo que se busca es no coincidir con la campaña. Las fuentes creen que hay margen legal.