Prevención, autosuficiencia, proximidad, responsabilidad, desarrollo sostenible o protección de la salud ambiental y humana son algunos de los principios que rigen el nuevo plan integral de residuos de la Comunitat Valenciana. El documento, aprobado en abril, «tiene como uno de sus objetivos la lucha contra el cambio climático y el avance hacia la economía circular». Así lo recordaba ayer Mireia Mollà, consellera de Agricultura y Emergencia Climática en la jornada sobre los retos y las oportunidades del Plan de Residuos organizada por Levante-EMV en colaboración con la cátedra del Agua, residuos y economía circular Facsa-Fovasa.
Mollà recordaba «el punto de inflexión» que supuso en materia de residuos la llegada del Botànic al gobierno de la Generalitat, aunque reconocía que aún queda «un gran trayecto por recorrer». Mollà destacaba como gran aportación de este nuevo documento el fin definitivo de la incineración. «Es algo que está descartado», señalaba, para hacer un inciso y calificar de «método cavernícola» el hecho de prender fuego a los rechazos que acaban en el vertedero.
Educación para transformar
Mollà abogaba también por una «fiscalidad positiva». «Hay que saber incentivar y que los ciudadanos encuentren estímulo en reciclar y el que no lo haga pagará las consecuencias porque estamos en una situación de emergencia climática», advertía. La consellera valoraba de forma muy positiva la futura implantación de los educadores ambientales. «Sin educación no hay transformación», reiteraba. En esa misma línea se expresaba Sergi Campillo, vicealcalde de València y edil de ecología urbana. «La ciudadanía necesita información, información y más información. Es imprescindible que las ciudades nos pongamos las pilas en la sostenibilidad», comentaba, detallando los pasos recorridos por València en los últimos cinco años.
Amparo Bes, directora de la cátedra y profesora del Departamento de Ingeniería Química y Nuclear de la UPV, era de las que incidía en la necesaria colaboración universidades-empresas «para buscar soluciones ambientales» a los retos que plantean las sociedades actuales. Algo que también remarcaban José Millet, vicerrector de empleo de la UPV y Jorge García Serra, director de la escuela de ingenieros industriales.
