La presidenta del PP valenciano, Isabel Bonig, afirmó ayer a los medios tras declarar ante la jueza que investiga irregularidades en la Fundación V Encuentro Mundial de las Familias, el ente que organizó la visita del papa a València, que ha quedado «absolutamente acreditado que no hubo condonación de deuda» a la fundación que organizó el evento religioso. Además, insistió en que existen documentos que lo demuestran y marcó distancia con el resto de indicios de delito que se investigan.

Así lo aseguró a su salida de la Ciudad de la Justicia, donde había sido citada en calidad de testigo para esclarecer si hubo condonación de una deuda de más de 500.000 euros a esta fundación cuando era consejera delegada de Vaersa en calidad de consellera de Infraestructuras.

La deuda no se pudo saldar hasta marzo de 2014, cuando se pudo liquidar la entidad durante la presidencia de Alberto Fabra. Tal como publicó Levante-EMV en 2018, es Bonig quien suscribe el escrito que libera a la fundación de pagar la deuda.

«El pasado 5 de marzo de 2014 se adoptó el acuerdo por el que la Generalitat se subrogaba en la deuda que la Fundación V encuentro mundial de las familias, como deudora, mantiene con Vaersa», introducía la exconsellera. Y continuaba el texto: «Vaersa acepta la subrogación, libera de la obligación de pago a la Fundación y consiente su liquidación».

En cambio, desde el entorno de Bonig ya explicaron a este periódico que la deuda la pagó la Generalitat a Vaersa «gracias a una modificación de crédito, en cumplimiento de un acuerdo del Consell». La intervención no puso reparos a este documento y fue aprobado por el protectorado de fundaciones, según consta en la causa.