En Tiempos Modernos, Chaplin lidera un momento revolucionario sin saberlo. Recoge una bandera roja que se cae de un camión y corre tras él para devolverla. No es consciente, pero empieza a seguirle una multitud. Así se siente Albert Soler, periodista de Diari de Girona, del grupo Prensa Ibérica, editor de Levante-EMV, que ayer presentó en València, ante un centenar de personas, su libro Nos cansamos de vivir bien en el que explica la otra cara del 'procés', la de muchos catalanes que se quieren bajar de un autobús con dos conductores locos al volante: Torra y Puigdemont. «Somos más y tenemos razón», dice Soler.

Azote del independentismo (lacismo le llama) desde sus columnas llenas de acidez, humor y mala leche, Soler cuenta con un público fiel, aunque los críticos con el independentismo aún no se hayan atrevido a salir del armario.

El periodista se ha convertido en un personaje incómodo para las elites independetistas con la única arma que la gente indefensa tiene contra los poderosos, el sarcasmo y el humor, y a fuerza de aplicar a rajatabla dos máximas periodísticas: «dudar de todo y tocar los cojones». De ahí ha llegado a la libertad absoluta, el nivel «que te jodan», lo llama, que aplica a todos los que le llaman 'facha' o 'botifler' y que le permite asegurar que a los líderes secesionistas les han acusado de sedición «porque el delito de gilipollas no existe».

A pesar de todo no son pocos los que se han creído el relato de «oprimidos» del 'procés' cuando hasta ahora en ningún lugar del mundo se vivía mejor en Cataluña, denuncia. Para Soler, el independentismo es como una religión, cuestión de fe, y por mucho que les engañen, «ellos seguirán creyendo en sus dioses», lanza. Y como tanto amarillo le empalaga, su libro es rojo por el color de la sangre que él mismo hace a diario contra los líderes independentistas,

Durante la presentación del libro, organizada por Levante-EMV en la sede de RuzafaStudio, Soler aseguró que al llegar a València se había acordado del Cid porque aquello sí fue un exilio y no el de Puigdemont. Añadió que lo mejor que puede hacer un valenciano que quiera ganar dinero es irse a Barcelona y sumarse a la causa catalana «como Eliseu Climent, Vicent Sanchis o Vicent Partal porque al revés no funciona; yo vengo aquí y solo me invitan a paella».

A la presentación asistieron el consejero de Prensa Ibérica Jesús Prado; el consejero delegado de Prensa Ibérica en la Comunitat Valenciana, Juan Antonio López Ruiz de Zuazo; el director general del área de Comunitat Valenciana, Baleares, Murcia y Andalucía, Enrique Simarro, y los directores de Diari de Girona, Jordi Xargayó, y de Levante-EMV, Lydia del Canto.

El editor, periodista y colaborador de este diario Juan Lagardera presentó el libro. «Es un valiente, un periodista corajudo, un catalán con todos los ingredientes, martillo pilón del independentismo y en una ciudad como Girona donde aún es más complicado ser crítico con un 'procés' en manos de una clase menestral de tercera división», remató Lagardera.