La cifra de fallecidos en residencias de la Comunitat Valenciana ronda ya el centenar (98) tras una jornada negra en la que se contabilizaron 17 muertes más en apenas 24 horas. Aunque la política de la Conselleria de Sanitat es desde el martes no informar sobre los municipios donde se ubican los centros en los que se han producido fallecimientos, se tiene constancia de brotes con varios fallecidos en residencias que todavía no se encuentra bajo la supervisión de la conselleria.

De hecho, la consellera Ana Barceló confirmó ayer que mantiene la vigilancia activa de control sanitario en las siete residencias de las que ya había informado anteriormente. El geriátrico Domus Vi de Alcoi, con el brote más mortífero con al menos 32 muertos, la residencia Santa Elena de Torrent, con 17 fallecidos, l'Acollida de València, la residencia Savia de Requena, así como las residencias Domus Vi de Alicante, la de San Juan Bautista de Morella y la residencia Santa Gracia de Vila-real.

El total de residentes afectados por coronavirus es de 459 y el número de trabajadores positivos asciende a 150. En total hay 80 centros de la Comunitat con casos positivos por coronavirus, 52 de ellos en la provincia de Valencia, 20 en la de Alicante ocho en Castelló. Barceló aclaró que se trata de situaciones muy distintas ya que en algunos centros solo hay un caso de residente positivo, en otras un trabajador también positivo y en otras admitió que «la situación es más complicada».

En éstas últimas estaría incluida la residencia de València donde se detectó el pasado fin de semana un importante brote y que obligó a hospitalizar a once de sus residentes, después del fallecimiento de otros dos, como informó ayer Levante-EMV. La cifra de positivos ha aumentado a 33 internos.