Muchas veces nos cuesta dormir durante los meses de verano por el intenso calor que

hace aunque atardezca. Esto es debido a las noches tropicales y a las altas temperaturas que pueden llegar a marcar los termómetros aunque no nos encontremos en plena ola de calor pero, ¿a qué nos referimos con «ola de calor»?

Uno de los principales problemas al hablar de una ola de calor es que no existe una definición precisa y única. Por ello, en muchas ocasiones se ha llegado a «exagerar» sobre el tema. Ahora bien, aquí se considera «ola de calor» a un episodio de al menos tres días consecutivos en el que el 10% de las estaciones meteorológicas consideradas marcan temperaturas máximas por encima del percentil del 95% de los meses de julio y agosto, observado entre los años 1971 y 2000.

La ola de calor que ha azotado a gran parte de la Península y Baleares llega hoy a su fin. Según anunció la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), la entrada de aire del norte refrescará el ambiente y traerá consigo un descenso de las temperaturas que notaremos bastante de cara a la mañana.

Los termómetros podrían situarse a partir del martes por debajo de los 30 ºC en gran parte de la Península, aunque en las mínimas apenas se esperan cambios. Esto quiere decir que continuaremos con noches tropicales a pesar de que el ambiente haya refrescaso.

Las noches calurosas, las sábanas pegadas al cuerpo y la falta de descanso son algunas de las consecuencias de las noches tropicales que muchas ciudades están pasando desde hace varios días. En el campo de la meteorología, nos referimos a noche tropical cuando la temperatura mínima es igual o superior a 20 ºC. Aunque este término y valor ha sido motivo de debate, ahora mismo en nuestro país es motivo de falta de sueño, cansancio e incluso mal humor al llegar la mañana.

Los expertos aseguran que la temperatura ideal para dormir oscila entre los 18 y 21 ºC, haciéndose especialmente complicado a partir de los 25 ºC. En las noches tropicales la temperatura más baja no se produce hasta poco antes del amanecer, por lo que es muy habitual dar vueltas en la cama buscando el lado frío hasta conciliar el sueño.

Estos próximos días hay que tener especialmente cuidado con ello. El trastorno del sueño puede ser perjudicial para nuestra salud.