Encontrar empleo es, en sí mismo, otro trabajo que, en ocasiones, se convierte en algo realmente complicado. Si, además, esa persona que busca trabajo se encuentra inmersa en unas condiciones sociales o físicas adversas, conseguir ese empleo es todavía más difícil. Para reducir esa dificultad trabaja Cruz Roja Española Comunidad Valenciana con su proyecto «Itinerarios integrales intensificados para personas de muy baja empleabilidad», con el que colabora Fundación «la Caixa».

Cruz Roja, con este proyecto, quiere mejorar las posibilidades de inserción laboral de esas personas que se encuentran en situación o riesgo de exclusión social extremo. Multitud de factores afectan a estas personas para acabar encontrándose en esa situación, por lo que su proceso de inclusión social requiere de una intervención integral, específica e intensificada a través tanto de acciones de empleo como de otras de intervención psicosocial.

La actual situación socioeconómica que vivimos, influenciada por la crisis sanitaria de la Covid-19, está teniendo importantes consecuencias sociales. Las tasas de paro se han incrementado e importantes programas de apoyo social han sido desmantelados, por lo que el número de personas en situación de vulnerabilidad y exclusión ha crecido de forma ostensible. Además, aquellas que estaban afectadas por esta situación, han visto cómo esta condición incluso se ha agravado en los últimos meses a causa del impacto económico de la pandemia.

Ante ello, Cruz Roja está organizando en la Comunitat Valenciana proyectos de empleo que, a través de itinerarios de inserción, trabajan con colectivos en riesgo de exclusión que se encuentran en una situación de muy baja empleabilidad.

A diferencia de otros programas, éste, por las múltiples dificultades sociales que presentan las personas que se acogen a él, hace necesaria una mayor intensidad en la intervención integral, un abordaje holístico de las situaciones, así como un acompañamiento y tutorización personal permanente en su proceso de búsqueda de empleo.

Para poder mejorar la situación de estas personas que parten en desventaja, la iniciativa de Cruz Roja propone el desarrollo de itinerarios integrados y personalizados de inserción sociolaboral que, con recursos internos y externos, incorporen perspectiva de género, competencial y de diversidad, que combinen medidas de empoderamiento, activación, motivación, información, orientación, formación en competencias transversales, capacitación profesional, acceso a las tecnologías, prácticas formativas en entornos reales, ayudas, acompañamiento e intermediación laboral, así como la tutorización y seguimiento permanente, siempre acompañada de una intervención comunitaria que facilite el acceso a servicios básicos complementarios que garanticen la inclusión activa.