La Conselleria de Sanidad registró ayer en su actualización diaria de datos del coronavirus 132 contagios en residencias en las últimas 24 horas, el segundo mayor incremento en una única jornada desde mediados de abril.

El departamento que dirige Ana Barceló no aportó cifras concretas de entre cuántos centros se reparten estos nuevos positivos, si bien el número de geriátricos «con algún caso positivo» se mantuvo estable respecto al día anterior, con 34 centros afectados por la covid-19. En paralelo, horas antes se conocía que Sanidad intervino el martes una residencia privada del Puig de Santa María tras detectarse un brote «importante» entre usuarios y personal. De los 132 casos nuevos, conselleria atribuye 99 a personas residentes y 33 a trabajadores de estos centros.

El brote en El Puig fue anunciado ayer por el ayuntamiento de la localidad, sin especificar a preguntas de este diario el número concreto de afectados, que aseguró desconocer. Según ha podido averiguar Levante-EMV, el viernes la residencia ya tenía tres positivos en covid-19 entre usuarios y empleados. El centro dispone de 124 plazas residenciales y 16 plazas de estancia diurna, según figura en la página web de Savia. El lunes Salud Pública realizó una inspección a la residencia para conocer el estado real sanitario que tenía en esos momentos.

Un día después, el martes, el departamento autonómico intervenía la instalación privada y enviaba a personal médico del Hospital de Sagunt, área sanitaria a la que pertenece El Puig, para que prestara servicio a los usuarios, al tener que confinar en sus domicilios a parte de los trabajadores.

También ayer, el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (Tsjcv) ratificó la prórroga de las medidas sanitarias aprobadas por Sanidad el 25 de septiembre y que afectan especialmente a estos centros de mayores. El auto avala la práctica de PCR a los nuevos ingresos y a empleados que retornen de vacaciones o sean nueva incorporación. Hace lo propio con la suspensión de las visitas y las salidas de residentes, pero matiza que esta medida debe quedar condicionada «en función de la situación epidemiológica del área geográfica de incidencia y de las características serológicas» de cada centro.

Al margen de las preocupantes noticias relacionadas con las residencias de mayores, la pandemia dejó ayer signos de retroceso tras una jornada en la que se reportaron 380 nuevos contagios —en los que están incluidos los 132 en geriátricos—, seis fallecimientos y 27 nuevos brotes.

El dato de nuevas infecciones es el más bajo desde el 18 de agosto y, junto a las 574 altas registradas ayer, deja el total de casos activos de covid en la Comunitat en 5.408. Los pacientes ingresados en hospitales se redujeron ayer en 17 personas (407), mientras 63 siguen en cuidados intensivos (una menos que ayer).

En cuanto a los brotes nuevos, todos salvo uno implican a menos de diez personas. El más grande se registró en Onda, con 21 afectados. Respecto al de Requena el martes, con 22 positivos, Salud Pública notificó que el foco surge del centro de salud y lo atribuye al ámbito laboral, ya que según fuentes oficiales afecta solo a trabajadores y «en ningún caso a pacientes».

Los médicos de Primaria cobrarán 36 euros por hora extra hasta el final de año

Los médicos y pediatras de Atención Primaria cobrarán cada hora extra que realicen hasta final de año a 36 euros, mientras que el personal de Enfermería y matronas ingresará en torno a 23 euros, después de la aprobación de ayer del plan de productividad en hospitales en una reunión entre la Conselleria de Sanidad y los representantes sindicales del colectivo.

Los trabajadores sanitarios de los centros de salud venían negociando con el área que comanda Ana Barceló posibles soluciones para descargar de trabajo a un colectivo al borde del colapso debido a la elevada carga de trabajo por la pandemia, agravada desde que asumen también las tareas del rastreo. Las retribuciones de estas horas extra era uno de los escollos y, pese a que finalmente se aceptó la última oferta que la conselleria presentó el lunes, la negociación dividió a los sindicatos. CC OO, UGT, Intersindical y Satse votaron a favor, mientras que CSIF se abstuvo y Cesmcv se posicionó en contra.

El resto de aristas por pulir tampoco sufrieron modificaciones respecto al acercamiento producido el lunes. Así, los requisitos para poder recurrir a las horas extra son que las bolsas de trabajo estén agotadas, que haya que cubrir vacaciones o bajas laborales de larga duración o que, simplemente, los equipos no puedan asumir toda la carga de trabajo, provocando retrasos en las citas superiores a cinco días.

Desde Cesmcv, el sindicato más crítico con el acuerdo materializado en la tarde de ayer, basaron el «no» en dos aspectos fundamentales: que no se equipare la remuneración por hora extra a los honorarios que se perciben en Madrid, Murcia o Baleares (200 euros por cada jornada de cuatro horas, es decir, a 50 euros la hora) y que no se limiten las agendas de las mañanas. El sindicato exigía un máximo de 30 pacientes en medicina familiar y 20 en pediatría.

Por su parte, el CSIF, el otro sindicato que no votó a favor, criticó las «insuficientes» partidas económicas y que no se amplíen las plazas estructurales de Atención Primaria. Ambas organizaciones sindicales coinciden en calificar de «parche» el acuerdo cerrado ayer.