La cifra de residencias afectadas por casos de coronavirus sigue en ascenso y se acerca peligrosamente al centenar con 87 centros de mayores con al menos un caso positivo en el día de ayer, 63 de ellos en la provincia de València. Eso sí, entre el 85 y el 90 por ciento de ellas se tratan de contagios con menos de diez positivos, y salvo los brotes masivos del Puig, en octubre con más de una decena de fallecidos; el de Llíria, con más de un centenar de contagios; y el último de la Pobla de Vallbona, con 73 casos positivos; la situación en esta segunda ola de la pandemia está siendo menos grave que la de hace meses, lo que demuestra que las medidas adoptadas están funcionando.

Según los datos facilitados ayer por la Conselleria de Sanidad, la cifra de muertos en residencias subió ayer a los 684 con cuatro nuevas muertes. De igual modo se produjeron 45 nuevos contagios de residentes y 27 trabajadores dieron positivo. .

Desde la patronal de las residencias Aerte se sigue insistiendo en la necesidad de hacer pruebas periódicas cada quince días en todas las residencias, y que no dependa como ahora del departamento de salud al que estén asignadas.

La consellera de Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, aboga precisamente por implantar dicha medida, más concretamente por hacer pruebas periódicas al personal de los centros de mayores, ya que en el caso de los residentes hacer test cada tan pocos días puede resultar una medida «muy invasiva» y le puede ocasionar «un perjuicio».

Además, recordó que los trabajadores son el «vector» de entrada del virus en los geriátricos. Asimismo aseguró que la Conselleria de Sanidad lleva desde el verano trabajando en el cribado masivo en residencias.