El pasado 16 de junio la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes de la Comunitat Valenciana (Aerte) presentó un escrito por registro de entrada dirigido a la Conselleria de Sanidad —apoyado y firmado por las principales empresas gestoras del sector— con varias propuestas para «garantizar la adecuada atención sanitaria a las personas residentes en centros residenciales ante un posible segundo rebrote».

Una de estas medidas que solicitaba el sector en dicho escrito era la realización de pruebas periódicas cada quince días a residentes y trabajadores. Cinco meses después de su propuesta y tras 180 personas fallecidas por covid en residencias desde entonces, la Conselleria de Sanidad todavía no tiene un plan para su implantación.

La idea que está sobre la mesa es hacer dichas pruebas periódicas, concretamente de antígenos, solo al personal y no a los residentes, al ser el principal foco de entrada del virus en las residencias, como ya informó este periódico. Pero a día de ayer todavía no había nada decidido, según indicaron fuentes de la Conselleria de Sanidad, quienes aclararon que también están a la espera del protocolo que marque el Ministerio de Sanidad.

Mientras tanto, la segunda ola de contagios en la Comunitat ya se ha cobrado la vida de unos 200 ancianos en centros de mayores —737 desde el inicio de la pandemia—, once de ellos en las últimas 24 horas. La mayoría de estas muertes se han producido tras brotes masivos que se iniciaron precisamente por casos de trabajadores asintomáticos, que en caso de haber sido detectados a tiempo, posiblemente habrían evitado la propagación del virus.

Los últimos tres grandes brotes en la provincia de Valencia se han producido en una residencia de Llíria, con más de un centenar de casos positivos y donde ya se han contabilizado al menos seis fallecidos; en una residencia de la Pobla de Vallbona, con nueve víctimas mortales por coronavirus, y en un centro de mayores de València con una veintena de contagios y cuatro fallecidos.

En el escrito presentado por el sector a mediados de junio, firmado por Aerte, Lares, Solimar, Savia y La Saleta, ofrecían su ayuda a la conselleria, tras el «análisis profesional y riguroso de las situaciones vividas en las residencias por la pandemia del coronavirus, en marzo, abril y mayo, con el objetivo de encontrar soluciones y mecanismos que ayuden a mitigar el posible impacto que pueda tener la misma en el presente y futuro de estos centros».

Coordinación sociosanitaria

Una de sus solicitudes, y que tampoco ha sido escuchada, era la creación de un grupo de trabajo entre las consellerias de Políticas Inclusivas y la de Sanidad con las entidades del sector de las residencias «para analizar la situación producida y poner en marcha los mecanismos que permitan reducir el posible impacto de esta pandemia en los centros, que no están diseñados para atender una pandemia de carácter sanitario, ni cuentan con los profesionales ni materiales necesarios para ello», según advertían.

Así critican la «imagen distorsionada del sector que se ha dado, más como culpable del trágico resultado por negligencia en su trabajo y no como una entidad afectada por la situación producida por esta crisis sanitaria».

Once fallecidos por covid en geriátricos de la C. Valenciana en las últimas 24 horas

Once personas de entre 72 y 97 años han fallecido por covid-19 en apenas 24 horas en residencias de la Comunitat Valenciana (se contabiliza tanto a aquellos que mueren en el propio centro como a los residentes hospitalizados). Uno de ellos una anciana de la residencia de València capital donde se detectó un brote masivo el pasado fin de semana, que se suma a los otros tres residentes fallecidos en el hospital de los que informó Levante-EMV, uno de ellos de 100 años.

Este es uno de los centros intervenidos por la conselleria de Sanidad, que mantiene bajo vigilancia activa de control sanitario a 19 residencias, diez de ellas en la provincia de Valencia y nueve en Alicante.

Asimismo hay al menos un caso positivo activo en 87 centros de mayores (58 en Valencia, 25 en Alicante y cuatro en Castelló). Y se contabilizaron 69 nuevos positivos de residentes y 24 trabajadores.